MOP y Aguas Andinas llaman a hacer un uso moderado y responsable del agua durante las fiestas de fin de año
Esto en contexto de la profunda crisis hídrica que vive la zona central y considerando que en la víspera de Navidad y Año Nuevo los consumos se incrementan en hasta un 30% sobre el promedio diario anual.
El Ministerio de Obras Públicas y Aguas Andinas hicieron un urgente llamado a la ciudadanía para hacer un uso responsable y consciente del agua ad-portas de las fiestas de fin de año, fechas en las cuales los consumos se incrementan de manera importante, marcando un consumo promedio diario que sube un 25% en Navidad y hasta 30% en los preparativos de Año Nuevo.
Los días 24 y 31 de diciembre se alcanza un peak de 40.000 litros por segundo alrededor de las 20:00 horas. Así, y para tener una idea, sólo en año nuevo se consumen cerca de 580 millones de litros más que en un día promedio, lo que equivale al consumo adicional de 3,2 millones de personas en un día.
“El aumento de los consumos en la víspera de Navidad y Año Nuevo es tremendamente significativo y necesitamos mantener como sociedad la conciencia de que el agua es un recurso escaso, que vivimos aún en una sequía permanente que requiere el esfuerzo de todos y todas para poder abordarlo”, dijo el ministro de Obras Públicas, Juan Carlos García.
Además, el ministro García se refirió a que actualmente se trabaja en una ley eficiencia hídrica con la que esperan actualizar el proceso tarifario con el objetivo de incentivar que las familias y las instituciones que tengan consumos bajo el promedio paguen menos que aquellos que están sobrepasando los promedios.
Asimismo, Eugenio Rodríguez, director de Clientes de Aguas Andinas hizo un llamado a los habitantes de la Región Metropolitana a “realizar un uso responsable del agua debido al complejo escenario de escasez hídrica que se mantienen en la zona central del país y que ha estado acompañada de olas de calor intensas y extensas. En especial, en los horarios previos a los festejos donde se da una intensidad en el consumo concentrado en muy pocas horas. La falta de precipitaciones y las altas temperaturas son algunos de los efectos del cambio climático que están disminuyendo el agua disponible en las cuencas. Por esto, es necesario que, entre todos, nos adaptemos a esta nueva realidad, por lo que una buena alternativa es diversificar y planificar las actividades”.
Pese a que tuvimos un invierno con más precipitaciones que 2021, la Dirección Meteorológica de Chile (DMC) proyecta que la capital registre temperaturas por sobre lo normal durante la temporada de verano. Por lo que continuamos con un déficit de 40% que nos mantiene en la crisis hídrica más grave de la que se tenga registro en nuestra historia que se prolonga por 14 años consecutivos.
Plan de Eficiencia Hidráulica
Para gestionar de forma eficiente la red de agua potable, desde Aguas Andinas indicaron que cuentan con un plan de eficiencia hidráulica que considera nuevas tecnologías e infraestructuras por cerca de US$100 millones de inversión, las que comenzaron a implementarse en 2018.
“A la fecha, ya se han puesto en operación innovaciones tales como rastreo satelital, métodos acústicos y gas trazador para detectar fugas de agua potable no visibles en superficie. Estas nuevas tecnologías permiten monitorear en línea 24/7 el 100% de la red, lo que corresponde a más de 13.000 kilómetros (para tener una referencia, entre Santiago y Madrid hay 10.770 km de distancia), a través de su Centro de Control Operativo”, explicó Eugenio Rodríguez.
Adicionalmente, se han implementado tecnologías de punta para detectar fugas de agua potable no visibles en superficie, para lo cual Aguas Andinas recorre anualmente más de 5.300 kilómetros de red en terreno reparando todo lo que se encuentre.
El Centro de Control Operativo de Distribución fue inaugurado hace tres años, teniendo destacados resultados en este periodo: La búsqueda y reparación de fugas no visibles en superficie durante 2022 ha permitido recuperar 620 litros por segundo de producción, equivalentes al consumo anual de 295.000 personas, más que el de una ciudad como Concepción.