“Son hechos que no podemos normalizar”: la postura del Gobierno por polémica de Paulina de Allende-Salazar con Carabineros

El Gobierno entregó su postura sobre la polémica que enfrenta la periodista Paulina de Allende-Salazar, quien terminó siendo despedida de Mega tras sufrir un lapsus en vivo y tratar de “paco” al cabo primero Daniel Palma, el último mártir de Carabineros.

La reportera -que hasta la semana pasada era parte del equipo del matinal Mucho Gusto- fue reprendida públicamente por el general Alex Chaván, quien la vetó en un punto de prensa en las afueras de la Cuarta Comisaría de Santiago, en donde trabajaba el asesinado funcionario policial.

“Si se encuentra presente la periodista Paulina de Allende, quien fue capaz de tratar a uno de nuestros mártires como paco, no vamos a dar ninguna declaración“, expresó el alto oficial, quien aclaró que el problema era en particular con la comunicadora.

La polémica saltó al Consejo Nacional de Televisión (CNTV), que recibió miles de denuncias en contra de De Allende-Salazar. A las pocas horas Megamedia anunció la desvinculación de la profesional.

El análisis del Gobierno

El subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, dio a conocer la postura del Gobierno específicamente con el veto que le aplicó el general Chaván a Paulina de Allende-Salazar en medio de la conmoción por la muerte del cabo Palma.

“Un principio básico de la democracia es la libertad de prensa y la autoridad no puede condicionar esa libertad de prensa. Y por lo tanto coincido con que son hechos que no podemos normalizar”, expresó la autoridad al programa Mesa Central de Canal 13.

Monsalve agregó que “es cierto que esto se dio en un contexto particular, y en ese contexto además creo que defender la libertad de prensa es una tarea básica de las instituciones democráticas”.

“Creo que uno puede comprender el contexto, pero también tiene que mirarlo en los principios que deben guiar la conducta de un país. Y a mí me parecen que no son ese tipo de hechos los que deben conducir al país“, comentó.

Sobre el lapsus de De Allende Salazar, la autoridad comentó que “creo que es muy importante la buena fe con la que actúan las personas, y en este caso entiendo que la periodista actuó de buena fe, cometió un error pero de inmediato pidió disculpas y cambió su expresión“.

“Uno también puede comprender las condiciones de conmoción que vive el país, y por lo tanto la forma en la que se reaccionó en el momento. Pero vuelvo a insistir, cuidar la libertad de prensa, y por lo tanto la libertad de opinión, es una tarea esencial de las instituciones democráticas”, cerró.