Longueira vuelve a renunciar a la UDI y no será candidato a constituyente

Pablo Longueira anunció que volvió a renunciar a la UDI, al que había retornado en medio de la discusión por una nueva Constitución y de paso descartó que busque un cupo a la Convención.

En una carta enviada a la directiva dirigida por el diputado Javier Macaya, y dada a conocer por El Mercurio, el otrora ministro de Economía acusó una “maniobra oscura el último día que se cerraba la inscripción de candidaturas” en las elecciones internas.

Longueira en un primer momento buscaba retornar a la testera del gremialismo, pero a último minuto decidió dar un paso al costado para apoyar la candidatura de Víctor Pérez, para así evitar controversias respecto a si estaba habilitado para poder votar.

Así, explicó que se asesoró con abogados constitucionalistas para ver si, a pesar de estar acusado en el caso SQM podía ser candidato a la Convención Constitucional, quienes le instaron a participar como independiente y así no generar polémica por sus vínculos con la UDI.

Es por esto que el pasado 6 de enero presentó una solicitud para invalidar su afiliación al gremialismo al Servel, lo que fue aprobado, pero además debía contar con una carta de respaldo firmada por Macaya y la secretaria general María José Hoffmann.

“Llamé al presidente de inmediato, pero no me atendió el teléfono. Llamé a otros miembros del equipo directivo para ver que mandaran urgente la carta, cosa que quedaron de ver de inmediato. Pese a la insistencia hasta el viernes a las 19 horas no se había enviado”, declaró Pablo Longueira, lo que gatilló su renuncia.

El ex timonel UDI argumentó que “después de siete años de estar alejado de la política, creí que era un deber volver a lo público pensando que podía aportar en un desafío trascendental para el país. Hoy tengo claro que ustedes no piensan lo mismo. Por lo anterior, es que deseo comunicarles que no seré candidato a la Convención Constitucional”, declaró.

Junto con ello reiteró su inocencia en el caso SQM, señalando que “en la vida pública me autoimpuse conductas éticas muy superiores a las normas y leyes” y de paso acusó a la Fiscalía de “asesinato de imagen”.