5 consejos para mejorar la privacidad en redes sociales
Con dedicar una pequeña porción de nuestro día a incrementar nuestra seguridad, nos estaremos protegiendo de posibles ataques, vulnerabilidades, hackeos masivos y demás.
1. Mejora tu contraseña
- Usa combinaciones de símbolos y números, mezclando varios grupos de caracteres. Por ejemplo, está bien si quieres poner Fido como contraseña porque nunca te olvidarás del nombre de tu perro, pero es mejor usar f1.d0
- Las mejores contraseñas son las generadas al azar. Por eso, es recomendable usar un generador online de contraseñas que definitivamente no pueden ser “adivinadas” por otra persona que tiene un mínimo conocimiento de nuestra historia personal
- Muchos servicios nos piden una “pregunta secreta” que debemos responder para recuperar nuestra contraseña. Tratemos de que las respuestas no sean demasiado obvias.
- Cambia tu contraseña regularmente. Algunos sistemas nos obligan a cambiar nuestra contraseña después de un determinado período de tiempo, pero servicios como GMail nos dejan tener siempre la misma contraseña. Ponte un lapso de tiempo finalizado el cual deberías cambiar tu contraseña (por ejemplo, una vez cada dos semanas).
2. Regula las aplicaciones instaladas
Nos pasa a los mejores: instalamos una aplicación en Facebook o en Twitter y nos olvidamos que existe. Si no nos llegan notificaciones de un juego de granja que usamos hace dos años, nos olvidamos de su existencia. Sin embargo, esa aplicación sigue teniendo permisos para acceder a nuestros datos. Por ende, la regla es simple: si no usamos la aplicación, no debería tener permisos en nuestra cuenta.
3. Usa la navegación segura
Esto tiene que ser fundamental no solamente cuando se trata de redes sociales. Nunca está de más recordarlo. Lo mejor es tener una sesión de navegación anónima, si queremos una solución rápida. En Google Chrome, podemos crear una ventana de incógnito; esto es ideal cuando usamos computadoras laborales que otra persona tendrá después de nosotros. Para hacerlo, podemos ir al menú de Configuración (el ícono de herramienta al lado de la barra de navegación) o presionar el atajo Ctrl+Mayús+N.
Otra forma importante de navegar de manera segura es a través del protocolo HTTPS. En Twitter, como nos mostró JJ, podemos activar el uso únicamente a través de una conexión segura. En Facebook también podemos activar el uso de SSL desde el panel de Configuración.
4. Una ayuda externa
Por supuesto, un buen consejo es siempre desconectarnos cuando terminamos de usar una red social. Sin embargo, la comodidad de abrir el navegador y que nuestra cuenta de Facebook ya esté logueada no tiene nombre. Por eso, podemos usar determinadas extensiones que nos permiten rastrear qué se está haciendo con nuestra información y quiénes están intentando acceder a nuestros datos.
5. Las cuestiones legales
Para ir finalizando, todas las redes sociales tienen términos y condiciones y se guardan mucho de no enojar a los usuarios en lo que respecta a la privacidad. Para defendernos ante un posible atropello de las compañías, tenemos que tener en cuenta cuáles son nuestros derechos y obligaciones. A veces puede ser mucho pedir, pero si sospechamos que algo puede estar violando nuestra privacidad en redes sociales, podemos consultar los términos para dejar las cosas en claro.