Defensa de Kim Dotcom asegura que se le acusa por crímenes que no existen en la ley de EE.UU.
El fundador de Megaploud, quien fue detenido en enero de 2012 y puesto en libertad bajo fianza en Nueva Zelanda, es acusado por la justicia estadounidense de crímenes contra los derechos de autor.
Los abogados del fundador de Megaupload, Kim Dotcom, aseguran que el informático alemán está siendo perseguido por Estados Unidos por unos delitos que no están tipificados en las leyes estadounidenses, indicó hoy el equipo legal en un comunicado.
Dotcom, quien fue detenido en enero de 2012 y puesto en libertad bajo fianza en Nueva Zelanda, es acusado por la justicia estadounidense de crímenes contra los derechos de autor.
“Las acciones de Estados Unidos contra Dotcom han sentado un aterrador precedente para los derechos básicos de los usuarios de internet y los innovadores de nuevas tecnologías”, dijo el abogado Robert Amsterdam, coautor de este informe junto a su compañero Ira Rothken.
Las autoridades estadounidenses atribuyen al portal Megaupload, que fue cerrado hace más de un año, haber causado más de 500 millones de dólares (382 millones de euros) en pérdidas a la industria del cine y de la música al transgredir los derechos de autor y obtener con ello unos beneficios de 175 millones de dólares (134 millones de euros).
En un documento divulgado por el equipo legal explicó que Dotcom ha sido acusado penalmente por acciones realizadas por los usuarios de Megaupload, mientras las acciones del magnate de internet son consideradas como violaciones secundarias a los derechos de autor.
No obstante, “el Tribunal Federal (estadounidense) carece del poder para criminalizar una infracción secundaria a los derechos de autor, algo que solo lo puede hacer el Congreso estadounidense, y (que hasta ahora) no lo ha hecho”, señaló el informe titulado por los abogados de la defensa, “Libro Blanco”.
Los abogados de Dotcom explican que la ley estadounidense establece una serie de responsabilidades civiles y penales por la violación a los derechos de autor, pero no incluye “responsabilidades por infracciones cometidas por terceros”.
El documento agrega que el Tribunal Supremo de EEUU define que en casos especiales los proveedores pueden ser imputados bajo las leyes civiles por la violación directa de terceros cuando distribuyen material “con el objeto de promover su uso para violar las leyes de derechos de autor”.
Rothken, criticó al gobierno de EE.UU. por actuar ilegalmente al cerrar Megaupload sin aviso previo, negarle a Dotcom la oportunidad de ser escuchado por la justicia, omitir evidencia exculpatoria presentada ante los tribunales e ignorar que ese servicio ha sido utilizado también por muchos usuarios que no han infringido las leyes.
El equipo legal de Dotcom instó al Comité para la Supervisión y Reforma Gubernamental de la Cámara de Representantes y la oficina de Responsabilidad Profesional del Departamento de Justicia de EE.UU. que investigue la conducta de la fiscalía en el caso contra Dotcom.
Además, ambos abogados recordaron que miles de clientes de Megaupload en todo el planeta han perdido sus archivos y material debido a la decisión de las autoridades estadounidenses de cerrar ese portal.
“La gran gama de abusos cometidos en este caso genera serias dudas en torno a si el Departamento de Justicia (estadounidense) está llevando a cabo una ‘acusación contratada’ contra los defendidos”, dijo Amsterdam, experto en materia de derechos humanos.
Los abogados manifestaron que el proceso contra Dotcom y Megaupload en Estados Unidos se realizó un día después de que el exsenador demócrata Chris Dodd, quien dirige la Asociación del Cine de EEUU (MPAA), amenazara con retener las donaciones para la campaña de reelección de Barak Obama en 2012 si no actuaba contra las amenazas que percibía Hollywood a sus derechos de autor.
Megaupload era entonces uno de los servicios de almacenamiento más grandes e importantes del mundo y con más de 1.000 millones de visitas por año y 60 millones de usuarios representaba el 4 por ciento del tráfico mundial del planeta.
El informático alemán y otros tres ejecutivos de Megaupload se encuentran en libertad condicional en Nueva Zelanda a la espera del juicio de extradición a Estados Unidos, en medio de un complicado proceso judicial y tras el espionaje ilegal a Dotcom por parte de la Inteligencia neozelandesa.
Los ejecutivos de Megaupload fueron detenidos en enero de 2012 en un operativo en la mansión que tenía Dotcom a las afueras de Auckland en un vasto operativo impulsado por el FBI estadounidense, que incluyó el cierre del portal, la confiscación de sus bienes y congelación de las cuentas y otras detenciones en Europa.