Chipamogli
Es difícil conocer Chile desde una oficina en Las Condes, Providencia o Lo Barnechea. Hay que subirse a la micro, andar apretado en el metro, hacer la fila en el consultorio y, claro, darle una mirada a las tendencias de Google.
¿Qué tienen en común el bono marzo, Jadiel, la receta con acelgas y el Chipamogli? Muchísimo. Son palabras, términos que de tanto ser escritos en Google se transforman en tendencias de búsqueda que bastante dicen del Chile actual y de la chilenidad contemporánea. Una idiosincrasia, eso sí, poderosamente permeada por tradiciones extranjeras, como Halloween, San Valentín y el Cyber Day.
Ayer, la oficina local de Google entregó a los medios de comunicación las doce categorías de los términos más solicitados y fuimos varios los asistentes a ese lanzamiento los que varias veces miramos con cara de sorpresa e interrogación.
¿Quién es Jadiel, que aparece quinto en el ranking de las principales tendencias de búsqueda de todo 2014? ¿Qué es Chipamogli, el cuarto “qué es” más buscado del año? ¿Por qué la gente buscó tan afanosamente la palabra “falacia” en Google? ¿Tan ricas son las acelgas que son la primera tendencia de recetas en nuestra patria? ¿Puede ser cierto que Halloween sea el acontecimiento más buscado, Cyberday el segundo en orden de importancia y que San Valentín sea top ten? Sí, claro, los algoritmos de la empresa nacida en Silicon Valley no mienten. Todo lo contrario, nos muestran una interesantísima foto de la realidad.
Es tan transversal en Chile el uso de computadores y tan exponencial el crecimiento de teléfonos inteligentes que no hay temor a equivocarse: lo que más se googlea es lo que más interrogantes e interés produce en la gran masa de compatriotas. Así entonces, podemos interpretar que mientras cientos de miles lloraban la muerte del reggaetonero Jadiel, ocurrida en mayo, otros, que claramente somos una ínfima minoría, ni siquiera sabíamos que el puertorriqueño existía.
De la misma manera podemos deducir que los futbolistas crean cultura popular de manera asombrosa y potentísima: bastó que el seleccionado nacional Eduardo Vargas dijera en un video “te vay en puras falacias” para que la palabra fuera ampliamente consultada. Y no es el único ejemplo. Cuando Johnny Herrera, arquero de la Universidad de Chile, dijo que “Felipe Flores es un Chipamogli jugando fútbol”, refiriéndose a un jugador de Colo Colo, la palabra en cuestión explotó en el buscador digital. Si bien el término había nacido en una nota del programa CQC, fue el futbolista el que lo convirtió en un término masivo.
Todo esto me hace pensar lo siguiente. ¿Cuán alejadas están las elites del Chile popular? Si varios de los periodistas -en general, profesionales de clase media ilustrada- presentes en el evento de Google desconocíamos algunos de los términos y con otros quedábamos perplejos, ¿qué se puede esperar de tantos directores de empresas, ministros, senadores, gerentes, es decir, de mucha de la gente que toma decisiones que impactan al resto de los habitantes de un país? ¿Sabemos en qué país vivimos? ¿Tenemos la menor idea de cómo comen, duermen, aman, gozan y sufren los chilenos que son fanáticos de Jadiel, se van en puras falacias, tienen una dieta con mucha acelga y le dicen Chipamogli al amigo? Lo dudo.
¿Se acuerdan de la candidata presidencial, Roxana Miranda, preguntándole en el debate a los demás candidatos de qué color era la tarjeta de atención de hospital? Nadie tenía idea. ¿Se acuerdan de la remodelación de la Quinta Normal, inaugurada hace tres años, cuando ninguno de los arquitectos o planificadores previó que la gente iba a convertir la laguna en piscina? Es difícil conocer Chile desde una oficina en Las Condes, Providencia, Lo Barnechea e incluso desde la comuna de Santiago.
Hay que abrir los ojos, subirse a la micro, andar apretado en el metro, hacer la fila en el consultorio y, claro, darle una mirada a las tendencias de Google. Es la única manera de empezar a entender en qué país vivimos. Y somos varios los que tenemos tarea pendiente.