Protagonista de Una Mujer Fantástica: “Le diría a Van Rysselberghe que vaya a ver la película”
La actriz, alabada en el extranjero por su rol en la cinta de Sebastián Lelio, aborda en esta entrevista cómo podría recibir el público chileno la historia de Marina (Vega) y Orlando (Vega).
“Impactante y cautivadora, divertida y surrealista, arrebatada y fortalecedora, esta es una película de sorprendente intensidad y cambios de tono sinuosos envueltos en una sólida coherencia de la visión”. Esa fue la opinión de David Rooney del The Hollywood Reporter sobre “Una Mujer Fantástica”, la quinta película de Sebastián Lelio, mismo de “Gloria”(2013).
El film cuenta la historia de Marina (Daniela Vega), joven camarera aspirante a cantante, y Orlando (Francisco Reyes), veinte años mayor. Ambos planean un futuro juntos, pero tras una noche de fiesta, él muere al llegar al hospital. Desde ese momento, la protagonista debe enfrentar las sospechas por su muerte, sumado a las dificultades por ser una mujer transexual, “una completa aberración”, para la familia del co-protagonista.
Ese es el argumento que nos presenta la cinta que llega a los cines de nuestro país el próximo 6 de abril, luego de que hace unos meses fuera elogiada y aplaudida en el Festival de Cine de Berlín, llevándose el Oso de Oro al Mejor Guión y el Teddy a la mejor película de la Berlinale, galardón destinado al cine de contenido homosexual o con especial sensibilidad hacia la comunidad LGTB.
En conversación con El Dínamo, su protagonista, Daniela Vega, confiesa que haber trabajado en la cinta fue “una tremenda alegría y como actriz, un tremendo desafío. Ha sido una experiencia increíble, yo creo que una de las cosas más difíciles que he hecho en mi vida, desde todo punto de vista: lugar actoral, lugar emocional, desde la exposición también, por qué no decirlo. Y todo ello ha significado puras cosas positivas. Creo que la película se ha transformado para mí en un vehículo nuevo en el que estoy andando y en el que me están dando muchísimo cariño”.
Respecto al recibimiento que recibió la cinta en Alemania, asegura fue completamente inesperado. “No me esperaba particularmente nada porque trabajar con expectativas es una cosa muy desagradable. Entonces, yo estaba disponible para lo que fuera. Yo quería, claramente, que a la película le fuera bien, pero no dependía de mi que eso fuera así porque eso queda a juicio de un jurado, de la gente”, explica.
“Pero lo que pasó fue otra cosa, la gente se enamoró de Marina y Orlando, a primera vista y de manera muy intensa. Mostramos la película y nos aplaudieron como diez minutos, estuvimos mucho rato arriba del escenario de un teatro gigante. Estábamos ahí, nos presentan al final de la película, el aplauso fue abrumador y nosotros quedamos como ‘bueno, y ahora, ¿qué hacemos?’, porque uno puede recibir un aplauso de un minuto, dos minutos, pero qué haces durante diez minutos que te están aplaudiendo. Se te agotan los recursos”, añadió.
– ¿Cómo crees que va a ser el recibimiento de la película en nuestro país? Porque, claro, es otra sociedad…
-Insisto en que la expectativa nunca es buena, esperaría que a la película le fuera tan bien como nos fue en Europa y en el resto del mundo. Hago la invitación para que la gente se acerque a las salas de cine desde el 6 de abril. Sería bueno que la gente en Chile prendiera con la película, por último por curiosidad, y luego vemos qué pasa con las emociones. Esta es una película que hace un ejercicio empático y que pone la moralidad y que pone la empatía en jaque, en juego, y ese ejercicio al que nos podemos someter todos, también podría significar algo lindo para la vida de cada uno de nosotros.
Para vega, “es una película que pretende hacer muchas preguntas más que responder, o convertirse en respuestas. Y esas preguntas que todo el mundo que se quiere hacer, porque cualquiera puede ser Marina, todo el mundo se enamora, todo el mundo hace una transición en el cuerpo. Todos conocemos el amor y además, todos nos vamos a morir. Entonces cualquiera puede ser Orlando y Marina, esa es la invitación que hacemos: a ponerse en ese lugar, a recibir la película con esa actitud. Lo que buscamos es generar un gallito, un juego empático-emocional-moral”.
– Quizás podría tomar fuerza por la discusión del proyecto de Identidad de Género
-Es posible, pero no es nuestro motor. De pronto la gente podría tomarlo como un mensaje positivo. Pero, mira qué interesante porque el país está disponible y el país avanza. Te lo puedo demostrar: hay un director como Sebastián Lelio, un guionista como Gonzalo Maza y un actor como Francisco Reyes que están disponibles para contar una historia que sale desde lo trans. Trabajar conmigo. Y hay una productora como Fábula que está apoyando este proyecto, eso emana en Chile, ocurre en Chile. Eso significa que el país efectivamente está disponible para generar esas reflexiones, lo que pasa es que nuestro sistema democrático nos hace elegir legisladores que no hacen bien su pega y la Ley de Identidad de Género, que es otro tema, está durmiendo en el Congreso hace cuatro años y nunca jamás hay quórum para difundirla.
– Siempre dicen “el país no está preparado”
– No es que el país no esté preparado, hay algunos que están haciendo que el país no avance. Pero el cine, el arte, te hace la invitación a avanzar, por último con la cabeza. Porque, ya, probablemente no tengamos la Ley de Identidad de Género pronto, pero tenemos esta hermosa película, que te invita a querer-te y a los otros, a respetar-te y a los otros, y empatizar con los demás. No sé si la película va a ser una respuesta a una llave para abrir una puerta bloqueada, pero sí podría significar entender la realidad de las personas, de los que te rodean, con mayor dignidad, con mayor empatía.
– ¿Cómo ves que una persona como Jacqueline Van Rysselberghe, que preside la comisión de DD.HH. de la Cámara, no ha sido capaz de presentarse a esta instancia para poder sesionar y discutir?
-Qué cosa más extraña. Ese es el poder que tienen y para eso están. Ese es el trabajo que cumple, yo cumplo otro trabajo que es bastante más amoroso y mucho más luminoso, menos oscuro que el que ella y otros hacen. Nuestro trabajo busca dignificar, no sé cuál es la motivación que tienen ellos.
-¿Qué le dirías a JVR?
– Le diría que vaya a ver la película.
“No pretendo ser un referente”
– Es posible que luego del estreno se te tome como la persona que visibilice el tema de la Identidad de Género
-No me siento referente de nada ni de nadie. Ni tampoco pretendo serlo. Sencillamente yo tomé la opción de ser actriz, mi trabajo es muy masivo y yo expongo parte de mi vida, principalmente, para que mi testimonio le sirva a otras personas que quizás estén un poco perdidas por ahí. Pero no es que yo tenga la respuesta para todo, no es que mi vida sea un ejemplo para nadie, no es que mi carrera signifique algo para otra gente. A mí no me sigue nadie, yo no soy Madonna, no pretendo serlo tampoco. Soy una actriz que hace cine, teatro y ópera, soy cantante además, y una dueña de casa los días domingo, amiga, hermana, hija, pinche, lo que sea el resto del tiempo. Por lo que, ese lugar de referencia a mí me queda gigante, no me lo puedo poner.
– ¿Y en caso de que te lo ofrecieran?
– No lo aceptaría. No aceptaría premios de ninguna fundación, ni reconocimientos de ese tipo porque no siento que mi trabajo amerite una cosa como esa. Mi trabajo está disponible para quien quiera acceder a él, pero eso no va a cambiar la realidad de ninguna persona.
– ¿Qué le dirías particularmente a personas que están atravesando por esta transición en el cuerpo?
– Que si sienten la necesidad de hacer un tránsito en el cuerpo, que lo pasen bien. Ahora hay más herramientas, hay más referentes, hay más libertad. Que lo tomen con dignidad, que lo tomen con la menor cantidad de ansiedad posible, porque todo en la vida llega y todo en la vida se va. Llega un momento en que si uno toma esa decisión, puede tomarla y la invitación que hago es que traten de conocerse lo más que puedan, que traten de pasarlo bien. Porque la transición es un proceso hermoso, donde se te llena de luz el cuerpo y se te llena de dudas, pero estás se disipan y el tiempo pasa y todo termina por converger en algo bueno. Y que traten de sobrevivir, que traten de contar la historia, que traten de llevar su vida a un lugar de luz y de amor, porque ese lugar, tal vez, es el lugar que puede salvarte la vida. Resistencia, dignidad y libertad, por ahí puedes llegar a algún lugar. No es que yo tenga la respuesta para algo, no es que yo te esté contando y te digo hay que hacer esto. No, yo hice eso y el resultado de mis decisiones están ahora acá. Fue lo que yo quise, pero si hay alguien que quiera hacer otra cosa que vaya y lo haga.