¿Qué tal?: En Alemania la energía solar ya es más barata que la proveniente de combustibles fósiles
La nación germana se está convirtiendo en una potencia solar, no porque las grandes empresas estén invirtiendo en enormes huertos solares, sino porque se incentiva a los ciudadanos para que produzcan energía limpia. Se calcula que un 51% de la energía renovable viene de la gente y no empresas.
En Alemania la energía solar se ha desarrollado tanto que, no sólo es la forma más ecológica de producir energía, sino que cuesta menos que el carbón o el gas natural.
Así, el porcentaje de producción eléctrica a partir de carbón y gas supone el 6% del total y cada vez es menos rentable. De ahí que las empresas ya no quieran usar esos métodos contaminantes. Resultado: la mejora del medio ambiente y la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero (GEI).
Los datos provienen de la Rheinisch-Westfälisches Elektrizitätswerk (RWE), principal empresa energética de Alemania, que asegura que el gas y el carbón ya no generan ganancias. Las centrales contaminantes no son rentables. Durante el primer semestre de 2013, la generación de energía convencional de la citada empresa se redujo en casi dos tercios, esto es, 6,5 GW menos. En cambio, hubo un récord de generación solar, que alcanzó los 5,1 Teravatios hora (TWh) en el mes de julio, un aumento del 42% respecto al mismo mes de 2012.
Y, si Alemania se está convirtiendo en una potencia solar, no es porque las grandes empresas estén invirtiendo en enormes huertos solares, sino porque se incentiva a los ciudadanos para que produzcan energía de una forma limpia. Así, los techos de edificios particulares y negocios se están llenando de placas solares. Se calcula que un 51% de la energía renovable de Alemania la producen los ciudadanos, lo que ha contribuido a reducir su precio.
Un país 100% renovable en 2040
Pero el paía quiere más. En la actualidad, las instalaciones solares son de 30 gigavatios (GW), pero el Ministerio de Medio Ambiente alemán quiere instalaciones de 60 GW. Algunos analistas aseguran que, en 2040, Alemania podría cubrir su demanda energética exclusivamente con energía renovable. Su siguiente reto será el almacenamiento.