
Y chorree en los escritorios también
En una época marcada por la estridencia de pantallas y egos, y cuando todo parece diseñado para capturar una atención efímera, Tiny Desk ha confirmado que lo más radical puede ser lo más simple. Con más de mil 100 conciertos de menos de 20 minutos cada uno (con un promedio de tres a cuatro presentaciones por semana), el proyecto se convirtió en un santuario inmaculado para melómanos, fans y espectadores.
Mauricio Jurgensen