Experto mundial habla sobre el pan chileno y la importancia de probar nuevas preparaciones
El destacado panadero francés cree que se debe aprovechar más la variedad de semillas e ingredientes propios de Chile, aparte de las tradicionales marraqueta y hallulla.
El tres veces campeón de la Copa del Mundo de Panadería, Didier Rosada, estará en Chile para realizar un Seminario Práctico de Panadería Tradicional Francesa, abierto a todo público y a todos los amantes del mejor pan del mundo en la Escuela Gastronómica de Inacap Apoquindo.
Además, asesorará a importantes empresas del rubro panadero, como Molino Collico en Temuco, la inauguración de la nueva escuela de panadería de Levaduras Collico y un seminario cerrado para clientes de Master Martini.
No es casualidad que el Seminario realizado por Rosada el año pasado fuera todo un éxito, puesto que Chile es el país número uno en consumo de pan en Latinoamérica (ALIM, 2013) y se ubica en el tercer lugar después de Alemania y Turquía en el ranking mundial.
En el seminario se enseñará, paso a paso y tal como se viene haciendo tradicionalmente en Francia desde hace siglos, la preparación de panes típicos de diferentes regiones como son la Baguette, el Pain de Campagne, las Brioches au Chocolat, la Fougasse y el Pain de Lodève, entre otros.
“Escogí panes que me van a permitir presentar y desarrollar las metodologías de trabajo para obtener el mejor pan y, sobre todo, fórmulas que se pueden adaptar a la panadería chilena. Voy a presentar tipos de panes bien atractivos y originales, para enseñar que la panadería también puede ser un arte, tanto a nivel de sabores como en lo visual”, adelanta.
Rosada asegura que para hacer el mejor pan se debe cuidar el manejo de los procesos de panificación y sobre todo, el equilibrio entre la formulación (usando ingredientes de origen lo más natural posible) y el proceso de trabajo (que debe conjugar la tecnología de la panadería moderna con el respeto por lo tradicional/artesanal).
“Por ejemplo, la tradicional Marraqueta chilena es un producto muy parecido (en la formulación y proceso de elaboración) a nuestra Baguette, sólo cambia la forma. Desafortunadamente, están desapareciendo las calidades originales de este producto tan noble. Es por esto que este seminario práctico es tan importante, ya que permite repasar los procesos en detalle y así recuperar las características de esa Marraqueta tradicional que los consumidores recuerdan de su infancia”, cuenta Didier.
“Hablamos de un país con un importante nivel de consumo de pan por habitante, y yo creo que eso no se logra sin un buen producto”, opina Didier. Aunque el francés también cree que en Chile se nota cuando el pan, específicamente la marraqueta – nuestro producto más representativo- está hecho sin respeto.
“En mis cuatro viajes a Chile, he podido ver mucha diferencia de calidad entre marraquetas trabajadas rápido y sin respeto por el pan, y las otras marraquetas artesanales, las que son excelentes. Recomiendo mucho las panaderías de barrio de Santiago”, cuenta Didier.
El mejor panadero del mundo le recomienda a Chile probar con nuevas posibilidades, más allá de la marraqueta y hallulla. “Por qué no probar diferentes panes con quínoa del norte, con variadas presentaciones de avena o centeno. Hay que explorar más en Chile, ya que tiene una tremenda diversidad de semillas, ingredientes propios , otros cereales, etc… y no hablo sólo de panes de molde”, asegura Didier.