
La grave crisis que se vive en Venezuela ya han dejado un saldo de -al menos- 29 muertos, cerca de 500 heridos y más de mil detenidos.
A raíz de ello, durante un partido de fútbol celebrado entre Deportivo Lara y Deportivo Anzoátegu, los jugadores de ambos equipos solicitaron al árbitro del encuentro un minuto de silencio por las vidas que se habían perdido.
Para sorpresa de todos, el juez no quiso conceder la petición y dio inicio al partido como si nada. La sorpresa vino después del pitazo inicial, cuando ninguno de los jugadores quiso moverse de su posición.
En la transmisión por televisión, el comentarista relataba lo que ocurría en el césped, pero rápidamente fue silenciado.