
Este martes se conoció la decisión de política monetaria del Banco Central. El organismo emisor decidió mantener la tasa de interés en 5%, en un contexto de alta volatilidad económica.
“La incertidumbre respecto de las perspectivas para la economía mundial ha aumentado considerablemente desde la reunión anterior, en particular tras los anuncios arancelarios realizados por Estados Unidos a comienzos de abril y sus desarrollos posteriores”, señaló el organismo presidido por Rosanna Costa.
La autoridad monetaria agregó que “los cambios en la política comercial a nivel global han deteriorado las perspectivas de crecimiento mundial, al tiempo que han aumentado la incertidumbre sobre su evolución futura. La magnitud y duración de estos efectos en la economía local aún son inciertas. En cuanto a la inflación, si bien continuará en niveles elevados en el corto plazo, su evolución reciente y la de sus principales determinantes reafirman las perspectivas de convergencia contenidas en el IPoM de marzo. Con todo, se mantiene la necesidad de cautela”.
Banco Central analiza escenario local
El Banco Central indicó que, aunque desde comienzos de abril las condiciones locales han mejorado —con la baja de las tasas de interés de corto y largo plazo, una apreciación del peso y un alza en la bolsa— “el crédito no muestra grandes cambios. La Encuesta de Crédito Bancario (ECB) del primer trimestre de 2025 sigue reflejando una demanda débil en todas las carteras, junto con condiciones de oferta sin modificaciones”.
El organismo detalló en su comunicado de prensa, que la reunión de política monetaria concluyó que el escenario se mantiene relativamente estable, en medio de los movimientos del contexto internacional.
“Los indicadores de actividad continúan apuntando a un mayor dinamismo reciente, en buena medida por el desempeño de sectores de oferta asociados a las exportaciones, acompañado de una recuperación gradual de la demanda interna. En febrero, el Imacec se redujo un 0,1% interanual (-0,5% mensual en la serie desestacionalizada), muy influido por el efecto calendario y el corte de suministro eléctrico de fines de ese mes. Dicha contracción fue algo menor a la prevista. Por el lado de la demanda, distintos indicadores del consumo privado y de la formación bruta de capital fijo continúan sugiriendo un desempeño acorde con lo esperado. El mercado laboral sigue mostrando holguras acotadas”, añadieron.