El Altiplano, las matemáticas y la lectura: las historias detrás de los cinco nominados chilenos al “Nobel de la enseñanza”
El proceso organizado por Elige Educar tuvo más de 24 mil nominaciones en todo el país triplicando la cifra de la versión anterior.
Este fin de semana se dieron a conocer los nombres de los cinco finalistas al Global Teacher Prize, premio conocido como el “Nobel de la Enseñanza”.
El proceso organizado por Elige Educar tuvo más de 24 mil nominaciones en todo el país triplicando la cifra de la versión anterior. De los profesores nominados, 56% corresponde a mujeres y 44% a varones. Un 66% proviene de la Región Metropolitana, 6,8% de la Región de Valparaíso y 5,5% de la Región del Bío Bío. En cuanto a su dependencia: 41% provienen de establecimientos particulares subvencionados.
De ellos, finalmente se eligieron 5 docentes. El sitio Global Teacher Prize Chile los dio a conocer con el perfil de cada uno de ellos.
Mauricio González Coronado – Colchane, Región de Tarapacá
El profesor de 58 años cursaba el Servicio Militar en 1980 cuando motivó a varios de sus compañeros a continuar con sus estudios y los ayudó con sus tareas. Ahí se dio cuenta que quería estudiar pedagogía y hacer clases en una localidad rural. Mauricio ejerce la docencia hace más de 28 años, hoy en el Liceo Técnico Profesional de Colchane como profesor de educación básica, donde debe desempeñarse en todas las asignaturas. Sin embargo, su especialización es en Ciencias Naturales. Actualmente, los alumnos de Mauricio son parte de un proyecto de astronomía denominado Warawara, que se está trabajando junto a Explora Conicyt y que tiene como finalidad comparar los conocimientos astronómicos ancestrales de los aymaras y cotejarlos con los conocimientos actuales.
Marcela Henríquez Aravena – Quirihue, Región del BíoBío
Tiene 38 años. Su madre fue profesora normalista, por lo que quiso seguir sus pasos y estudiar pedagogía. Eligió desarrollar su carrera en el lugar donde nació, donde ya se ha desempeñado por 15 años. Su carrera la ha desarrollado en el Liceo Polivalente Carlos Montané Castro de Quirihue como profesora de Lenguaje y Comunicación y sus estudiantes han destacado en diversos concursos literarios y torneos de debate. Por ejemplo, los años 2007 y 2008, un grupo de sus alumnos obtuvo el primer lugar nacional en el concurso de ensayos “Leer, pensar y hablar”, organizado por la Fundación Amigos del Arte y EducarChile. También han sido destacados en competencias de debate en actualidad a nivel regional, venciendo a destacados colegios de alto rendimiento académico del país.
Beatriz Saavedra Saavedra – Lampa, Región Metropolitana
Su abuelo, junto al que vivía en el campo en Llay Llay, creció sin saber leer ni escribir. Ella quiso enseñarle, pero él estaba convencido de que no podría. Esa experiencia despertó en ella unas ganas profundas de enseñar. A pesar de las múltiples barreras sociales y económicas que enfrentó Beatriz pudo estudiar con apoyo de una beca. Hoy enseña a los más pequeños en los niveles prekinder y kínder. La más importante en sus prácticas es el “Juego de Rincones”. A través de esta metodología, todos los niños y niñas logran avanzar en su aprendizaje.Los buenos resultados de esta idea –reconocidos incluso a nivel Provincial- impulsaron a que “El Rincón de la Televisión” trascendiera el nivel parvulario.
Marcela Rodríguez – Arica, Región de Arica y Parinacota
La mujer de 30 años ama las matemáticas desde su niñez. Esta profesora, que se desempeña en el Liceo A-1 Octavio Palma Pérez de Arica, dice que desde que tiene uso de razón escuchó de números y geometría. Sus padres fueron dos apasionados profesores de matemáticas y hoy usa el juego y la neuropedagogía aplicada a las matemáticas. Esta destacada profesora también creó una preuniversitario sin fines de lucro para los alumnos de escasos recursos que no pueden costearse uno privado, obviamente aplicando toda la neuropedagogía posible para lograr un mejor aprendizaje.
Eduardo Cortés Inostroza – Quillota, Región de Valparaíso
Este docente de la Escuela Industrial Ernesto Bertelsen Temple de Quillota, de 35 años, usa una metodología basada en proyectos como la creación de un brazo robótico, de un cortador de botellas de vidrio que permite reutilizar ese material, la creación de una bicicleta eléctrica cargada con energía solar o de una máquina de soldar hecha con trasformadores de microondas le han significado a sus estudiantes numerosos reconocimientos en diversos concursos y ferias tecnológicas de la región. Sin embargo, una de sus ideas se ha transformado en un proyecto emblemático. Se trata de la “Misión Aconcagua”, proyecto desarrollado con sus estudiantes de la especialidad Técnico en Electricidad: hacer una completa revisión e instalación eléctrica para las familias de una población de escasos recursos cercana a la escuela.