[Video] La Sinfónica invita a redescubrir a Bach y a Brahms en un concierto especial
Se trata de obras de estos maestros que fueron orquestadas un siglo después por Schoenberg y Stokowski, interpretadas ahora bajo la batuta de Josep Caballé-Domenech.
Las obras “Passacaglia y fuga para órgano en Do Menor” de Johann Sebastian Bach en la orquestación del compositor británico Leopold Stokowski y el “Cuarteto para piano N° 1 en Sol menor” de Johannes Brahms en la transcripción orquestal de Arnold Schoenberg, podrá escuchar el público que asista al próximo concierto de la Temporada de la Orquesta Sinfónica de Chile. El programa, denominado “De Alemania a Chile” contempla además las obras de “Andante” de Alfonso Leng y “Danza Fantástica” de Enrique Soro. La cita es el viernes 6 y sábado 7 de junio, a las 19:40 horas, en el Teatro del Centro de Extensión Artística y Cultural de la Universidad de Chile.
“La idea musical original redefinida por una exquisita orquestación y un juego compositivo que nace en otro siglo hacen de este programa una joya a descubrir. La pregunta será como siempre: ¿Dónde acaba Bach y empieza Stokovsky? ¿Dónde acaba Brahms y empieza Schoenberg? La respuesta estará en cada uno de los asistentes”, afirma el director Josep Caballé-Domenech, agregando que este es un programa “muy atractivo”.
Director de orquesta británico-norteamericano considerado entre los mejores del siglo xx, Leopold Stokowski (1882-1977) se distinguió por su particular personalidad, genial y controvertida. Antes de tomar la batuta fue organista durante una década lo que le brindó un amplio conocimiento de Bach, de cuya obra hizo al menos 37 orquestaciones y transcripciones. Stokowski, que durante sus 70 años de trayectoria grabó más de 700 piezas musicales, entre ellas la música de la película “Fantasía” de Disney, provocó polémica con sus transcripciones de obras de Bach que transformaba en atrayentes sinfonías, algo que no gustó a los puristas.
Johannes Brahms compuso el “Cuarteto para Piano N° 1 en Sol menor, Op 25” entre 1856 y 1861 cuando el compositor estaba en la flor de su madurez temprana. Se estrenó en 1862 y de inmediato contó con buena recepción del público. Hoy está considerada como una de sus obras más célebres y se considera que su popularidad se debe a la audacia de los temas del primer movimiento, el encanto y la delicadeza del “intermezzo” y trío, la grandeza del “Andante” y el final. ¿Serían éstas las características que motivaron a Arnold Schoenberg a orquestarlo? El propio compositor adujo las razones: “Primero me gusta la pieza, segundo se interpreta pocas veces, siempre está muy mal interpretada porque cuando mejor es el pianista, más fuerte toca y las cuerdas no se escuchan”, afirmó. En la versión de Schoenberg para esta bella música de Brahms, la orquestación es desbordante en su paleta sonora y la convierte en una obra nueva y vigorosa.
Entradas desde $ 6.000 general y desde $ 2.000 en boleterías del teatro, Metro Baquedano (Plaza Italia) o a través de daleticket.cl. Más información en www.ceac.uchile.cl