Karina Valenzuela, la supuesta amante de Sergio Freire, conversó con el programa Only Fama de Mega y contó cómo conoció al comediante. Esto luego que se revelara el término de la relación entre el humorista y Maly Jorquiera.
“Desperté en shock. No me imaginé que esto iba a tener tanta repercusión”, comenzó diciendo Karina.
“Agradezco que me hayan dado la posibilidad de dar mi testimonio, la opción de defenderme y dejar claro que las cosas no son cómo se están diciendo”, aseguró en la entrevista con Michael Roldán.
En ese sentido, la supuesta amante de Freire contó que ambos se conocieron en un show de stand up comedy que realizó Sergio a inicios de octubre.
“Llegamos al show y al terminar, él preguntó por mí, porque quería hablar conmigo. Me saqué una foto con él, como una fan más, nos pasamos el Instagram y comenzamos a hablar por DM como amigos”, relató.
Consultada sobre si sabía de la existencia de Maly, la mujer dijo: “No hablábamos de Maly. Ellos son personas conocidas, famosas, pero no hablamos mucho de esas cosas, además él me dijo que estaba soltero”.
Posterior a ello, detalló que la relación con Freire duró alrededor de una semana. “El coqueteo existió después, a los días del show, él me invita a una productora a conversar, y yo fui con una amiga. Nos reímos, me invitó a compartir un momento y ahí fue cuando se notó una atracción”, dijo.
“Luego de eso, me conversa un par de días y yo se lo comento a una amiga y ella me dice ellos deben estar juntos aún. Yo no le dije nada y lo bloqueé de todo“, dijo.
“Pequé de ingenua. Estoy vulnerable, vengo de una relación que me pasó lo mismo, sin querer”, afirmó Karina.
“No me siento orgullosa, ni minimizo la situación (…) porque a nadie le gustaría que se lo hicieran. Yo no lo hice a conciencia. Creo que la vida me jugó una mala pasada en este caso”, cerró Valenzuela.
En un nuevo capítulo de El Fútbol de Antes, hoy recordamos ese extraño objeto de papel, chiquitito y arrugado, en el que se anotaban cada semana los resultados de los partidos y que, para que no se perdiera, cargabas doblado en la chaqueta o en la billetera durante todo el año como una suerte de enciclopedia básica y ayuda memoria.
Pocos chilenos tienen buenos recuerdos de sus trámites ante notarios o conservadores: precios altos, largas esperas, horarios reducidos y formalidades ficticias (“firmó ante mí”). Pese a su impopularidad, incluso la Convención Constitucional los “ignoró”. Por eso, es útil recordar qué son y qué función cumplen: notarios y conservadores son auxiliares de la administración de justicia, sirviendo como ministros de fe y administradores de registros públicos (incluyendo escrituras, propiedades, derechos de minas, aguas, sociedades, etc.)