Para crear música con toques espaciales ya no se necesitará solo programas de computadores. Ahora, los artistas podrán acceder directamente al sonido del Universo. Al sonido que nunca antes se había escuchado, dado que el sonido necesita de un medio material para propagarse, y en el vacío espacial, no existe tal materia.
Pero astrónomos chilenos del observatorio ALMA sortearon las leyes de la física. “Para este ejercicio ocupamos las similitudes ondulatorias entre la luz y el sonido, para trasponer las ondas de radio recibidas por ALMA a ondas sonoras con las que artistas y músicos pueden trabajar”, explicó Antonio Hales, quien trabajó en la iniciativa.
Su compañero, Ricardo Finger, agregó que “esta traducción no es una interpretación libre, sino que una transformación hecha con el máximo rigor matemático, tal que los sonidos resultantes fueran consistentes con las señales que ALMA observó”.
“Sonidos del alma” y músicos se encontrarán este sábado 5 de diciembre en la feria internacional Sónar+D. La idea es crear una experiencia inédita, en la que música y astronomía se fusionen.