Las personas de derecha tienden a ser menos inteligentes que los de izquierda, y las personas con poca inteligencia en la niñez tienden a crecer con opiniones racistas y anti-gay, según el nuevo estudio que ha causado controversia.
La política conservadora funciona casi como una “puerta” para el prejuicio en contra de otros, dicen los académicos canadienses.
En el documento se analizan los grandes estudios del Reino Unido en comparación con la inteligencia infantil, con sus puntos de vista políticos a la edad adulta a través de más de 15.000 personas.
Los autores afirman que las personas con baja inteligencia gravitan hacia la derecha porque hacen que se sientan seguros.
Fundamentalmente, el nivel educativo de la gente no es lo que determina si son racistas o no – es la inteligencia innata, de acuerdo a lo que concluyeron los académicos.
El estatus social tampoco parece jugar ningún papel.
El estudio, publicado en Psychological Science, afirma que la ideología de derecha constituye una “vía” para personas con baja capacidad de raciocinio que luego se convierte en prejuicios contra grupos como los de otras razas y los homosexuales.
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