El tiroteo de Las Vegas es el más mortífero en la historia de Estados Unidos
Víctimas superaron a la masacre de la discoteca Pulse en Orlando.
Como Stephen Paddock, de 64 años, fue identificado por el Departamento de Policía de Las Vegas el atacante que desde una habitación del Hotel Mandalay Bay Resort disparó contra una multitud de 20 mil personas que asistía a concierto country Route 91 Harvest Music Festival.
Paddock no fue capturado vivo y según la policía de Las Vegas cometió suicidio. Su cuerpo fue encontrado junto a 10 armas automáticas en la habitación del piso 32 del Mandalay. Un equipo SWAT ingresó al cuarto luego de derribar la puerta con una explosión controlada.
Los 58 muertos, que podrían aumentar a medida que pasen las horas, transformaron este tiroteo en el ataque más mortífero en la historia de Estados Unidos, superando al ataque contra la discoteque Pulse, en Orlando, en junio de 2016.
No es la primera vez que un concierto es el blanco para un ataque masivo. En 2015, miembros del Estado Islámico disparon contra la multitud que se encontraba asistiendo al concierto de Eagles of Death Metal en el teatro Bataclan en París.
Hace cuatro meses, 22 personas murieron en un ataque suicida con bomba en el concierto de Arianna Grande en Manchester.
Según el organismo no gubernamental Gun Archive, este año ha habido más 46 mil incidentes con armas en Estados Unidos. Y hasta hoy, habían muerto 11.652 personas por estos hechos.
El tiroteo de Las Vegas trajo a la memoria de muchos el ataque ocurrido en la Universidad de Texas en 1966. Ese verano, el ex francotirador de la Infantería de Marina, Charles Withman (25 años) decidió subir a la torre del campus y apertrechado con una decenas de armas, disparó indiscriminadamente hacia los jardines de la universidad. El resultado fue 7 muertos y más de 30 heridos.