Cómo se originaron las fuertes protestas de la extrema derecha en Inglaterra
Las protestas en Inglaterra incluyen consignas antiinmigrantes e islamofóbicas, y también ataques a mezquitas y hoteles conocidos por dar alojamiento a refugiados.
Las autoridades británicas confirmaron que alrededor de 6.000 policías fueron movilizados este miércoles para hacer frente a las protestas antiinmigración convocadas por grupos de extrema derecha en ese país.
En la primera crisis que enfrenta el gobierno laborista de Keir Starmer, varias ciudades del Reino Unido se han visto sumidas en violentas protestas encabezadas por grupos extremistas de derecha.
De acuerdo con el reporte de los medios de prensa británicos, la ola de manifestaciones incluyen consignas antiinmigrantes e islamofóbicas, y se han perpetrado ataques a mezquitas y hoteles conocidos por dar alojamiento a refugiados que llegan a ese país.
Qué originó las protestas de la extrema derecha en Inglaterra
Según el reporte de la prensa, las protestas en Inglaterra comenzaron luego del asesinato de tres niñas en la ciudad Southport, tras el cual grupos extremistas difundieron la falsa información en cuanto a que el atacante era un hombre que estaba solicitando asilo o un inmigrante musulmán.
Sin embargo, tras lograr la detención del atacante, que además dejó a otros ocho menores de edad y dos adultos heridos, la policía confirmó que se trataba de un joven de 17 años nacido en la ciudad de Cardiff, en Gales.
Pese a la aclaración, las violentas protestas se mantienen con el paso de los días y de acuerdo con lo informado por la policía británica, solo el fin de semana se detuvo a más de 370 personas.
Durante las movilizaciones los manifestantes han generado fuertes enfrentamientos con la policía, mientras las autoridades redoblan esfuerzos para reducir los niveles de violencia por parte de los seguidores de la extrema derecha.
Entre las ciudades afectadas por la violencia en Inglaterra se cuentan Londres, Manchester, Liverpool, Bristol, Belfast, Nottingham y Leeds.
Al referirse a las protestas, el primer ministro, Keir Starmer, dijo que “la gente de este país tiene derecho a estar segura y, sin embargo, hemos visto cómo se atacaba a comunidades musulmanas, a mezquitas, a otras comunidades minoritarias, saludos nazis en la calle, ataques a la policía, violencia sin sentido y retórica racista“.