
La Fiscal Regional Metropolitana Occidente, Solange Huerta, inició formalmente una investigación para determinar cómo se filtró la declaración en calidad de testigo que se le realizó a la ex Presidenta Michelle Bachelet y que ayer fue difundida íntegramente por un medio de comunicación.
“La Fiscal Regional Solange Huerta dispuso que se iniciara una investigación tendiente a determinar el origen de la filtración, identificar a quienes tuvieron algún grado de participación entre todas las personas e instituciones que tuvieron acceso a la declaración y aplicar las sanciones penales que correspondan”, consigna un comunicado difundido por el Ministerio Público.
Huerta había decretado el secreto de la investigación para todas las partes. Incluso había advertido a los abogados que corrían riesgo de recibir una sanción disciplinaria si es que entregaban detalles del expediente a la prensa, amparándose en el Artículo 182 del Código Procesal Penal, que señala que las actuaciones de investigación realizadas por el Ministerio Público y por las policías serán secretas para los terceros ajenos al procedimiento.
En ese marco la nota asegura que “la investigación sigue su curso normal y en la actualidad se continúa con el proceso de tomar declaraciones, con el propósito de cotejar datos y antecedentes recogidos a lo largo de casi trece meses. Una vez concluida esta etapa, se adoptarán las decisiones pertinentes en torno a la persecución de eventuales responsabilidades penales”.
Se señala el compromiso de la fiscal Huerta por “esclarecer los hechos y conocer la verdad sobre lo ocurrido durante la madrugada del 27 de febrero de 2010, así como determinar errores y eventuales responsabilidades asociadas a la ejecución de los protocolos de alerta”.