Fallido 'balconazo' en la Alianza: Allamand no quiso 'dejarse humillar' por diseño de Lavín

Recién hoy se conoció la real razón de por qué el triunfo de Pablo Longueira sobre su contendor dentro de la Alianza no fue coronado con un nuevo ‘balconazo‘, como era el diseño acordado entre Joaquín Lavín y  y el diputado RN Nicolás Monckeberg, que tenía como objeto trascender con una imagen de ‘unidad’, pero que más bien reflejó todo lo contrario.

De acuerdo a la información publicada hoy por Bío Bío,  el extraño y privado saludo entre los candidatos, del cual existe una borrosa foto tomada con  celular por el diputado UDI Giovanni Calderón, tiene su explicación en la molestia de Allamand ante la idea de Lavín de hacer un ‘balconazo’ , o bien una conferencia de prensa conjunta.

De acuerdo con el relato de este medio, cerca de las 21:30 y tras ingresar a la sede de la UDI por  la calle Lota, acompañado de su mujer, Marcela Cubillos y el subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla,   Allamand, tras darle un abrazo y felicitar a Longueira, se prestaba a retirarse junto a su mujer. En eso fue alcanzado por  por Lavín, quien lo conminó a cumplir con el plan.

Según relata el Nicolás Monckeberg a radio Agricultura, sobre el plan original,  Lavín quería ‘innovar’ con otro invitado que, al parecer, encendió la ira del ex abanderado RN: “Cuando entramos, Joaquín Lavín nos dijo que saliéramos al balcón todos los candidatos de la Alianza, es decir, junto a Laurence Golborne, pero no pudimos hacerlo porque no habían periodistas, así que se sacaron las fotos del saludo de Allamand con Longueira con celulares”.

Monckeberg añade: “Como fue a última hora, se optó por lo tradicional que fue saludarlo. Además, a última hora Joaquín Lavín dice que salieran los tres al balcón, y era algo que no se había analizado, y además Laurence Golborne hace 10 minutos había criticado por Twitter a Andrés Allamand. Y después supe que Laurence Golborne ni siquiera estaba ahí”.

La reacción de Allamand fue una clara muestra de su molestia y una pasada de cuenta ante el ataque que sintió por parte del ex ministro de Desarrollo Social durante la campaña de Primarias:  apuntó con el dedo a centímetros de los anteojos de Lavín  espetándole:  “No tienes límites, hasta cuándo me vas a humillar, conchetumadre”.

Según el relato de Bío Bío, Lavín habría retrocedido impávido observando la furia de Allamand, la cual trataron de minimizar los ministros que estaban ahí, entre ellos el titular del Interior, Andrés Chadwick, la vocera de Gobierno, Cecilia Pérez y de Defensa, Rodrigo Hinzpeter.

Monckeberg habría explicó  además  que él mismo quedó con la misión de gestar el saludo en el café, con señoras, al otro día. “El espíritu unitario de los dos era completo. Pero eso de que hubo roces es mentira. Hablaron, Andrés Allamand le dijo sinceramente que contaba con toda su disposición, Pablo Longueira dijo que desde el punto de vista de candidato iba a garantizar la máxima equidad para las parlamentarias”, aclaró.