Senado aprueba en general el proyecto de Reforma Tributaria
El ministro Arenas, junto con destacar el carácter histórico del acuerdo alcanzado con la derecha, insistió en que con este proyecto "el FUT se termina".
La Sala del Senado aprobó en general el proyecto de ley que modifica el sistema de tributación de la renta e introduce diversos ajustes en el sistema tributario.
La votación fue de 33 a favor, 1 voto en contra de la senadora Lily Pérez y la abstención del UDI Iván Moreira, sin que se produjeran pareos, señaló el secretario de la Sala.
El ministro de Hacienda, Alberto Arenas, manifestó su “tremenda satisfacción” por este resultado. “Hemos dado un paso sustantivo para hacer realidad una reforma estructural que le planteara al país la Presidenta Bachelet“, dijo, destacando además el “acuerdo histórico” obtenido con la Alianza en forma previa a esta votación, el que permitirá darle “estabilidad” a esta reforma y “financiar en forma sustentable el programa de la Presidenta Bachelet”.
Las indicaciones deberían verse en el Senado como máximo hasta el 7 de agosto, indicó Arenas, quien insistió en que el FUT se termina. “No hay nada similar ni en el texto del proyecto ni en las indicaciones”, subrayó.
La votación y las intervenciones de los senadores
El texto legal llegó a la Sala con el informe favorable de la Comisión de Hacienda. La discusión sin embargo, giró en torno a la pertinencia del acuerdo.
En su intervención el presidente del PPD, Jaime Quintana felicitó a la derecha por sumarse a la propuesta del Ejecutivo. Y en alusión a su polémica metáfora de “pasar la aplanadora” haciendo valer las mayorías que tiene el oficialismo en ambas cámaras, esta vez dijo que: “Acá no hemos pasado ninguna máquina…es un gran acuerdo y por eso lo vamos a respaldar”.
Justificando su abstención, Iván Moreira indicó que “en lo personal consideré inconveniente que la UDI suscribiera el acuerdo, porque estoy seguro que esta reforma significará una creciente pérdida; espero -por el bien del país- estar equivocado; (…) sin embargo, mi partido ha pactado y no iré contra ello”. El senador agregó que “todos las encuestas mostraban cómo la reforma aumentaba su nivel de desaprobación, de esta manera los responsables en lograr que el Gobierno se replanteara su propuesta original fue, principalmente, la ciudadanía”.
Desde la otra vereda, el senador RN, Andrés Allamand, resaltó el reflote de la llamada “política de los acuerdos”. “Los acuerdos que algunos mataron bajo las ruedas de retroexcavadoras gozan de buena salud… Hay que valorar el acuerdo alcanzado. Tenemos diferencias, nuesotros caminos para disminuir la desigualdad son distintos. Hay quienes creen que la desigualdad es aumentar impuestos, nosotros creemos que se combate con crecimiento…”
En tanto, junto con anunciar su voto en contra, la senadora Lily Pérez señaló respecto al protocolo que “en Amplitud lo valoramos pero nos preocupa que mientras cae el crecimiento y el empleo por la desaceleración, se haga una reforma que no va a traer beneficios sociales”. Asimismo, hizo un llamado a explicar con claridad a la ciudadanía cómo le va a afectar la reforma, dada la complejidad de la materia, la que a su juicio será “gravemente perjudicada”. De esta forma, dijo defender la libertad de emprendimiento y el rol que cumplen las empresas en el crecimiento del país.
En su intervención, Alfonso De Urresti (PS) recordó que ésta reforma “es lo que comprometió la presidenta Michelle Bachelet durante su campaña”, y que en ese sentido, ésta apunta a “financiar gastos permanentes con ingresos permanentes”, otra de las compromisos de campaña de la mandataria. “Sobre esa base vamos a apoyar esta inciativa. Esta es un iniciativa que presentó la Nueva Mayoría (…) y valoro que en un acuerdo democrático se haya establecido un protocolo para poder mejorar y reforzar esta propuesta. Acuerdo y diálogo, pero con los principios que le hacen bien a nuestro país”, dijo, rechazando que se haya perdido el espíritu original de la iniciativa.
De Urresti criticó además los dichos del presidente de la Asociación de Bancos, Jorge Awad. “Aquí no hay padres de la criatura“, manifestó. “Este señor, además de arrogante e irrespetuoso, y trata de desvalorizar un acuerdo político (…) Esto lo acordamos y lo vamos a firmar nosotros, que no se se pase de listo el señor de los bancos. Nosotros vamos a honrar el acuerdo que se ha logrado, y cumpliremos el objetivo que la Presidenta se planteó”, agregó el parlamentario.
El senador Alejandro Guillier, por su parte, junto con calificar como “imperativa” la realización de una reforma, también fustigó declaraciones como las de Awad, ya que “andar reclamando paternidades de la criatura ahonda la percepción de que éste es un acuerdo espúreo y aumenta la desconfianza de la ciudadanía en la clase política”.
Guillier apuntó que para recuperar esa confianza el proyecto debía cumplir con lo que se prometió en un principio. “La reforma no debe exigir más a las ya exigidas clase media y las pymes, sino que efectivamente hacer que paguen más los que ganan más. Y que los verdaderos estímulos estén en las pymes y no en las grandes empresas”, agregó.
Ena von Baer (UDI), subraya que cuando se llega a un acuerdo “todas las partes ceden”. Y afirma que “acá ha habido un cambio muy profundo respecto de cómo entró este proyecto al Congreso, acá se hizo un transplante al corazón de la reforma“, destacando los diversos aspectos en que, a su juicio, se “avanzó” en el acuerdo. “Esto no es lo mismo que ingresó a la Cámara“, insistió, por ejemplo, con respecto a la situación de los pequeños y medianos productores de cerveza artesanal, respecto de quienes se eliminó un impuesto.
“¿Nos gusta el proyecto que estamos votando hoy? No, no nos gusta, pero creemos que se han minimizado muchos de sus efectos negativos para la clase media y las regiones, por ejemplo”, añadió Von Baer. “Tratamos de evitarle un mal mayor al país, por eso votamos a favor”, concluyó.
Alejandro Navarro, por su parte, fustigó las palabras de la “doctora Von Baer”, que “dice que transplantó el corazón” a la reforma tributaria, y acusó a la derecha de querer justificar su “cambio de posición”, ya que ahora apoyan el proyecto “mientras antes aseguraban que llegaba el caos si se aprobaba”. Aseguró que dentro de la Nueva Mayoría “seguimos defendiendo lo mismo que al principio”, recordando incluso el comic que lanzó.
Finalmente, fue el turno del ministro Alberto Arenas, quien reiteró en su intervención que la reforma no tendrá costos para la clase media. “Celebramos este acuerdo, que creemos permitirá un Chile más inclusivo”, subrayó.