Cardenal Ricardo Ezzati por Juan Barros: "Un obispo, eventualmente, puede renunciar"

El cardenal Ricardo Ezzati se refirió a la polémica desatada luego de que el Papa Francisco nombrara a Juan Barros como obispo de Osorno, cargo que asumió el sabado pasado en medio de protestas, luego de que denunciantes de los abusos cometidos por Fernando Karadima, lo acusaran de ser testigo de los actos cometidos por el sacerdote de El Bosque.

Al respecto, el religioso afirmó que “todo acto de violencia es repudiable, siempre y en todo lugar. En una sociedad civilizada las diferencias se pueden y deben resolver a través del imperio de la razón y del diálogo. En esta circunstancia, en cambio, hubo gente que prefirió actuar con violencia, sin respeto siquiera a la celebración eucarística ni a la fe de quienes querían expresarla. Lo sucedido es un escándalo. Lo siento de veras”.

Consultado por la decisión del Papa y las críticas que surgieron, tras el anuncio que ratificó a Barros como obispo, tanto en la misma Iglesia como en sectores laicos de la comunidad, Ezzati sostuvo que no hay un quiebre en la Iglesia debido a este tema. “La Iglesia está formada por personas libres que se han encontrado con Jesucristo. Su consistencia es el Resucitado y alrededor de Él se configura como una comunidad de discípulos-misioneros animados por el Espíritu de Jesús, cuya misión es el Reinado de Jesús y la tarea de servir a los hombres y mujeres de todos los tiempos y naciones, especialmente a los más pobres y marginados de la sociedad”, dijo.

Respecto a las gestiones que realizó el mismo cardenal para detener la nominación de Barros como obispo de Osorno, tema que fue revelado por El Dínamo, Ezzati señaló que “un obispo es elegido y ordenado para servir a la diócesis que el Papa le asigna. Sin embargo, por la ordenación episcopal, el obispo “con y bajo Pedro” es también partícipe de la solicitud de todas las iglesias. Por eso, como expresión de esa solicitud de comunión y responsabilidad con el Santo Padre, usted o cualquiera puede concluir que no ha faltado mi honesta y debida aportación al discernimiento de la suprema autoridad de la Iglesia“.

“El Santo Padre había tomado una decisión informada y discernida. Nosotros estamos en comunión con el Santo Padre y, por tanto, con fe y obediencia adherimos a sus orientaciones y decisiones“, agregó.

Además, señaló que las acusaciones de abuso contra el actual obispo de Osorno, no hará retroceder a la Iglesia ya que “se ha enfrentado y condenado los casos de abusos”. Pese a esto, algunos plantean que la renuncia de Barros a su cargo, podría dar solución al problema a lo que el mismo cardenal indicó que “un obispo, eventualmente, puede renunciar a la encomienda recibida. El Código de Derecho Canónico lo contempla”.