Nabila Rifo fue encontrada en la calle de Coyhaique, cerca de su casa, con visibles daños en su cabeza, sin algunos dientes y sin sus globos oculares. Alguien se los había sacado después de pegarle con un bloque de concreto en el rostro. El presunto agresor: su ex pareja, padre de dos de sus hijos.
Esta misma historia la vivió en 2013 Carola Barría, quien perdió sus ojos luego de que su ex marido la atacara. La mujer, quien vive en Punta Arenas, no da entrevistas. Sin embargo, ante el nuevo caso accedió a conversar con el cientista criminalístico, Francisco Pulgar, quien a su vez contó al medio El Pingüino parte de la conversación.
“La verdad yo nunca me imaginé que me podría pasar algo así a mí, ni que mucho menos le iba a suceder a otra mujer”, relata Barría.
Ahora Nabila está reaccionando poco a poco, ya que en la ex Posta Central le quitaron los sedantes. Pero aún no sabe lo que le pasó. Para el día en que se entere de todo, Carola Barría, quien vivió el mismo proceso, le entregó un mensaje de esperanza.
“Qué le puedo decir a ella, que el día que despierte, ojalá tenga la suficiente fuerza y que se agarre de lo que más quiera en la vida y que albergue la mas mínima esperanza y de ahí se tome y pueda sobrellevar lo que es esa desesperación, la angustia y la impotencia de haber sido tan maltratada y con tanta secuela”, dijo.
Sobre cómo superar un hecho tan traumático manifestó: “Yo sé que tiene hijos y que se tome de la mano de ellos y que se diga que no importa, yo no los veo, pero aquí estoy y voy a estar con ustedes y ustedes conmigo. Que eso le sirva de consuelo, que tiene vida y que todo se puede lograr, paso a pasito, pero todo se logra”.
Carola Barría, madre de dos hijos, estuvo tres meses internada en el Hospital Clínico de Magallanes, lugar donde obtuvo prótesis oculares. Juan Ruiz, su marido y agresor, se enfrentó a balazos con Carabineros y murió de un impacto de bala en el cráneo.
“Si bien pude haberme quedado lamentando mi situación, victimizándome, jamás he querido aparentar eso ante nadie, no me siento una víctima de la vida, sólo de la circunstancia que me tocó vivir, algo que sinceramente no me merecía”, señaló.
