Javiera Parada: “Hoy veo muy difícil una alianza de RD con la Nueva Mayoría”

Por estos días, Javiera Parada se encuentra trabajando de lleno en el área de Nueva Constitución de Revolución Democrática y en gestiones para reinstalar este tema en la agenda, de cara al último año de la administración de Michelle Bachelet.

La ex agregada cultural del Gobierno en Nueva York hoy asegura que tiene poca fe en que el Ejecutivo presente la propuesta que permitiría que el próximo Congreso escoja la fórmula para cambiar la Carta Magna y que la apuesta apunta al próximo Parlamento, el primero sin binominal.

“Yo veo difícil que se consigan los 2/3 que se necesitan para aprobar la iniciativa”, dice en esta entrevista a El Dínamo, donde además aborda la relación de RD con el Gobierno, las críticas y la construcción del Frente Amplio con otros sectores de izquierda.

-Este jueves se reunirá el Gobierno y la Nueva Mayoría para fijar las prioridades dentro de lo que queda de la administración de la Presidenta Bachelet. ¿Ves el Proceso Constituyente dentro de esas prioridades?

-Yo creo que sigue siendo una urgencia el que tengamos una nueva Constitución, porque muchas de las demandas que hay hoy en la calle tienen que ver con un sistema que nos tiene amarrados. Pero hay grupos que piensan que no es una prioridad y que la Constitución se puede seguir reformando hasta el infinito. ¿La urgencia continúa? Sí. ¿El mundo político se está haciendo cargo de esto? No. El Gobierno debería estar preparando la reforma al capítulo 15 -que permitiría al próximo Congreso definir el mecanismo para cambiar la Constitución- para enviarlo como dice su propio itinerario y no hemos tenido ninguna noticia de eso.

-¿Has visto al menos la intención de la Presidenta? En la última entrevista a El Mercurio relativizó esa prioridad en lo que queda de administración.

-Para mí es un compromiso que ella tomó con Chile, con el 62% de votantes que apostaron por ella. Es uno de los tres compromisos de campaña más importantes de este Gobierno y es importante que se cumpla, no sólo por eso, sino porque es un problema que Chile arrastra desde que se dictó la Constitución de 1980.

-Pero hay una alta probabilidad de que el Proceso Constituyente no continúe en las prioridades del Gobierno…

-Sería muy grave. Pero también hay que tener claro que el itinerario del Gobierno es solo una parte del Proceso Constituyente, que comenzó hace varios años exigiendo una nueva Constitución y una Asamblea Constituyente. Yo hoy tengo serias dudas de que se consigan los votos para la reforma al capítulo 15, pero esto va más allá de lo que el Gobierno o los partidos de la Nueva Mayoría decidan. Esto va a ocurrir antes o después y será responsabilidad del Gobierno abrir los canales para que esto suceda.

-¿No hay esperanzas de que se apruebe el cambio al capítulo 15?

-Yo veo difícil que se consigan los 2/3 por la actitud que ha tenido la derecha en el Proceso Constituyente. El único partido de ellos que se manifestó a favor fue Evópoli, que a mí me consta que están muy dispuestos y disponibles a participar de esta discusión, pero el resto no está comprometido. Eso no impide que el Gobierno presente la reforma a la que se comprometió y creo que va a ser muy bueno saber quiénes son los que están comprometidos realmente con la democracia.

-También hay sectores dentro de la NM que piensan que no es una prioridad.

-Es como lo que pasó con Jorge Burgos, que se jactaba de haber parado un proyecto de ley firmado por más de 50 diputados transversales para hacer un plebiscito. A mí me choca mucho que aún haya sectores de la NM que no estén convencidos de una nueva Constitución, pero la realidad es que los hay. Nosotros desde fuera de la NM pero articulándonos con todos los que estén convencidos de una nueva Constitución vamos a seguir generando movilización social para que suceda más antes que después.

RD y el Gobierno

-Tú trabajaste en el Gobierno, también otros militantes de RD, pero en algún momento decidieron dejar sus cargos. Se les cuestiona que “huyeron” cuando al Gobierno le empezó a ir mal. ¿Cómo recibes esas críticas?

-Nosotros fuimos muy claros en que no éramos parte de la Nueva Mayoría. Sin embargo, sí había agendas que nos interesaba impulsar y en la Reforma Educacional teníamos propuestas, por lo que cuando se abrió la posibilidad de participar, sin ser parte del Gobierno, se decidió hacerlo. También cuando decidimos transformarnos en partido político, íbamos a ir a las elecciones municipales y luego las próximas parlamentarias, lo que requería que nos definiéramos un poco más. La Ley de Inclusión, la principal reforma en que trabajaron nuestros compañeros, ya estaba entregada y en ese momento las dos personas que tenían cargo de responsabilidad política en el Mineduc deciden salir, lo que coincidió con que yo decidiera regresar a Chile a participar del Proceso Constituyente y a seguir impulsando la campaña de recolección de firmas. Coincidieron esas dos cosas para salir del Gobierno y tener más libertad para conformar un nuevo referente político con otras fuerzas.

-El lunes, el diputado Nicolás Monckeberg tuvo una discusión con Giorgio Jackson en Modo Termómetro, donde dijo que en RD querían “poner la visión de que vienen caídos del cielo”, desmarcándose de la idea de haber participado de este Gobierno.

-Nadie ha querido sacarse la imagen de que participamos. Yo siempre asumo la participación que tomamos de participar para impulsar la reforma educacional, que no ha sido todo lo que queríamos. Ésa es otra de las razones por las que se decide salir del ministerio.

-Dices que la reforma no fue lo que ustedes querían, pero gente de RD participó directamente en la elaboración de ésta…

-¡Por supuesto! Y participamos también en la reforma que se llama Ley de Inclusión. Y eso dejamos listo y estamos muy orgullosos de lo que hicimos en esa parte de la reforma. Todo lo que viene ahora con la reforma a la educación superior tenemos críticas y así lo hemos manifestado.

-Pero son críticas a una reforma en que ustedes también participaron…

-Es que nosotros participamos en la Ley de Inclusión, básicamente, que es lo que hoy rige.

-¿No fue un error la participación crítica?

-No, yo creo que fue muy importante que RD estuviera los dos primeros años de gobierno, impulsando la reforma educacional y corriendo los límites. La reforma hubiese sido distinta si no hubiésemos estado allí, pero efectivamente hoy ni la Nueva Mayoría tiene acuerdo sobre lo que tiene que hacer. Los que quieren mantener el status quo tienen mucho poder.

-¿Piensas postularte como diputada de RD?

-RD hoy está en un congreso estratégico donde vamos a decidir lo que haremos en los próximos dos años, así como la política de alianzas, a dónde vamos a llevar candidatos y si vamos a llevar candidato a la presidencia o no. Es una decisión que está tomando todo el partido en su conjunto. A partir de ahí veremos quiénes deben ser candidatas y candidatos.

-Pero, personalmente, ¿es una opción que te interese?

-A mí me interesa trabajar en política y donde sea más útil. Si eso es en el Congreso y así lo quiere RD, allí voy a estar. Si es útil que esté en segunda línea, armando las campañas, ahí voy a estar. La política es la construcción colectiva y hoy estamos empeñados en armar una batería de propuestas para ofrecerle al país y una nueva forma de hacer política en que estemos de acuerdo con nuevos socios. En ese sentido, es importante que haya suficientes mujeres representadas y yo estoy disponible para lo que el partido decida, incluyendo una candidatura al Congreso. Lo único que hoy está definido es que Giorgio Jackson sí va a ir a la reelección.

-En las elecciones municipales pasadas, a RD no le fue muy bien. Tenían seis candidatos a alcaldes y ninguno salió electo. ¿A qué atribuyes esa baja votación, siendo uno de los partidos mejor evaluados?

-Es que yo creo que nos fue bastante bien. Tengo una lectura distinta. Donde llevamos candidatos a alcalde, tuvimos un promedio de 17% de votación y donde llevamos candidatos a concejales, tuvimos un promedio de 10% de votación.

-Aún así, no tuvieron alcaldes electos…

-Tenemos nueve concejales electos del pacto, donde cuatro son de RD. Nosotros evaluamos no con vítores ni para descorchar botellas, pero cuando terminamos el proceso de firmas, dos semanas después estábamos inscribiendo las listas municipales. Sabíamos que era poco probable que tuviéramos un súper éxito electoral, pero creo que el triunfo de Jorge Sharp (del Movimiento Autonomista) en Valparaíso fue una buena experiencia de trabajo en conjunto. Ésta era primera vez que participábamos de una elección, con gente que recién ahora aprendió a hacer campañas, hacer puerta a puerta, recolectar fondos. Fue una experiencia positiva.

Las presidenciales

-Por tu historia familiar, has estado cerca de lo que fue la Concertación. ¿Cómo ves la candidatura hoy de Ricardo Lagos?

-Mi familia viene del comunismo y del anarquismo, y nunca ha sido parte de la Concertación. Mi abuela María Maluenda es verdad que es una de las fundadoras del PPD pero la mayoría nunca ha sido parte de la familia concertacionista ni mucho menos. Por otro lado, veo con preocupación cómo al día de hoy hay 21 pre candidatos y aún no veo ningún proyecto. No sé qué piensa, qué país quieren hacer, cómo piensan profundizar la democracia. Creo que todos están repitiendo el mismo problema que todos vimos en 2013, cuando creían que una figura puede salvar un proyecto político y no un proyecto político tiene que encontrar una figura.

-¿Y cómo observas la pre-candidatura de Alejandro Guillier?

-Es que es lo mismo, no hay un proyecto detrás. Y hoy no tenemos ninguna intención de participar con algún pacto que tenga que ver con la Nueva Mayoría. Hoy los candidatos que hoy vemos no tienen proyectos y son básicamente propuestas personales.

-¿Tendrían alguna colaboración crítica con ellos en el futuro otra vez?

-Son decisiones que se toman en el congreso de RD, pero yo veo muy difícil que se haga una alianza con alguien elegido por la Nueva Mayoría.

-¿Cuáles son las características que debe tener el candidato presidencial de este frente amplio?

-Es que antes de elegir a un candidato, tenemos que saber cuáles son los mínimos programáticos en que estamos de acuerdo. Hasta que no tengamos esa claridad no podemos buscar un candidato o candidata, porque para nosotros lo importante es lo que va a encarnar esa persona.