Drogas y pedofilia: los fantasmas que rondan en el Congreso

La diputada deRevolución Democrática Maite Orsini removió recuerdos que ya habían sido olvidados en el Congreso: que asocien a sus integrantes a las drogas y a la pedofilia.

En su visita al matinal Muy Buenos Días de TVN, Orsini aseguró que “hay vínculos (con el narcotráfico), absolutamente, en la política, en los carabineros (…) en la Cámara de Diputados también, yo creo que sí. Creo que el narco también ha permeado a los políticos, no quisiera dar nombres, porque no corresponde (…) Yo creo que hay parlamentarios que tienen relación con el narco”.

“Yo no tengo pruebas. Yo creo que -como hemos visto en Carabineros, los militares que se ha visto han sido financiados por el narcotráfico, políticos en San Ramón- el narcotráfico ha permeado nuestras instituciones mucho más que lo que nosotros podemos ver, y yo me atrevería a decir que, como han permeado otras instituciones, la Cámara de Diputados y Diputadas no es un espacio donde yo pondría las manos al fuego por que no ha permeado el narcotráfico”, agregó.

Esta no es primera vez que el Congreso ha estado bajo esta acusación. La primera ocurrió casi 25 años atrás, en el segundo período legislativo después del regreso a la democracia.

Caso drogas

En 1995, la entonces diputada Evelyn Matthei se enfrentó con sus excompañeros de Renovación Nacional, partido al que perteneció hasta 1993. La razón: una entrevista de Francisco Javier Cuadra en la edición de Qué Pasa del 13 de enero aseguraba que “algunos parlamentarios consumen drogas”, afirmación que Matthei apoyó a través de la misma revista diciendo “no me cabe la menor duda que hay parlamentarios que consumen drogas”.

En conversación con EL DÍNAMO, María Antonieta Saa, entonces diputada, contó cómo se vivió la denuncia al interior del Congreso: “Fue bien terrible. Quedamos todos sorprendidos. Fue un golpe fuerte. Ella no dio nombres, se le pidieron, pero no los dio”.

Los rumores apuntaban a los RN Andrés Allamand y Alberto Espina, además de Jorge Schaulsohn (PPD). “El presidente era Jaime Estévez y el vicepresidente Andrés Chadwick e hicieron que funcionarios de la Cámara se hicieran el test de drogas. Incluso algunos diputados se lo hicieron”, recordó Saa, haciendo alusión a los 11 parlamentarios que públicamente se sometieron al examen de orina en dependencias del Congreso, entre ellos, Matthei.

La acusación quedó en nada y Cuadra, quien también militaba en RN, renunció al partido y fue procesado por la Ley de Seguridad del Estado, siendo condenado a 540 días de prisión remitida.

Spiniak

En 2003 nuevamente RN se vio involucrado en una acusación que sacudió a la opinión pública, pero esta vez desde el lado de los acusadores. El 10 de octubre de ese año, la diputada Pía Guzmán (RN) señaló a la prensa que había miembros del Congreso involucrados en la presunta red de pedofilia del empresario Claudio Spiniak.

“Hay antecedentes de que en el círculo íntimo de la red había políticos, dos de la Alianza y uno de la DC. Esto está siendo investigado en la justicia y en las policías. Corresponde a ellos dar la última palabra”, dijo la entonces diputada, sin nombrar a los supuestos involucrados.

Sus declaraciones generaron una ola de críticas, principalmente de la UDI, así que Guzmán tuvo que hablar nuevamente un día después de su denuncia: ofreció disculpas por el daño que pudo haber causado con sus dichos, pero mantuvo la acusación. Ese mismo día el escritor Pablo Huneuus aseguró que los nombres a los que aludía la parlamentaria eran los senadores Jovino Novoa y Carlos Bombal.

“Ella tuvo el repudio fuerte de la UDI porque, al parecer, ella apuntaba a senadores de la UDI. Fue tremendo el bullying que le hicieron”, cuenta María Antonieta Saa respecto a este episodio que terminó con Guzmán declarando ante el ministro en visita Daniel Calvo el 21 de octubre.

La UDI se querelló contra Guzmán y Huneuus por injurias y calumnias ese mismo mes, pero la justicia falló a favor de la diputada quien, en agosto de 2004, ofreció disculpas públicas a Jovino Novoa: “Lamento, en el alma, que estos hechos hayan causado tanto daño (…) la semana pasada señalé que me hacía responsable de la credibilidad que le había dado al testimonio de Gemita Bueno y, por lo tanto, el daño que esto le había causado a Jovino Novoa y a su familia, reitero esto”.

Ya alejada de la vida política, Pía Guzmán reapareció en 2009 luego de superar una leucemia mieloblástica aguda en una actividad convocada por la entonces Presidenta Michelle Bachelet.