Declaran admisible querella contra diputada Leuquén por agredir a trabajadora
Por ahora sólo falta la resolución del Juzgado de Garantía respecto al desafuero de la parlamentaria.
El cuarto Juzgado de Garantía de Santiago declaró admisible la querella en contra de la diputada de Renovación Nacional, Aracely Leuquén, por agredir en estado de ebriedad a una trabajadora del bar Geopub, ubicado en la comuna de Las Condes.
El pasado 11 de noviembre, la representante de la región de Aysén llegó hasta el local a eso de las 13:30 horas y comenzó a consumir pisco sour. Posteriormente, lanzó papas fritas a los empleados y se enfrascó en una discusión con la supervisora, Katherine Contreras, a quien en un momento agarró violentamente del pelo.
Tras la decisión del juzgado, sólo falta la resolución respecto al desafuero de la parlamentaria, la que ofreció disculpas públicas tras la polémica que generó la situación.
“Lamentablemente, ese día tuve la mala ocurrencia de solicitar alcohol y sumado a los remedios que ingiero resultó una mezcla desafortunada“, señaló en aquella oportunidad la congresista.
“Quiero expresar mis más sinceras disculpas públicas al personal que me atendió aquel día. Hace un año que me encuentro con tratamiento médico. Es cierto, nada va a reparar el daño causado”, agregó.
En la acción judicial se detalla que la diputada RN “(…) preocupó a los empleados del local su cada vez más mayor agresividad a medida que se emborrachaba, ebriedad que iba acompañada, arrojándole comida (papas fritas), tambaleándose en su camino al baño, generando con ello una situación incómoda”.
“El cajero avisó que Leuquén reclamaba por su cartera supuestamente perdida, “culpando de ello a los empleados, todo esto en evidente estado de ebriedad (…) debí instruir a los encargados de la barra que no le vendieran más alcohol, pidiéndoles que se ocuparan que no saliera del local, que se llamara a alguien conocido, porque su estado era tal que era un peligro para ella y para nosotros que saliera sola(…) exigía que la dejaran ir, gritando, alegando que no la podían retener como diputada de la República”.
Ante la resistencia que puso la diputada para cancelar la cuenta de lo consumido, la supervisora intentó razonar con ella; sin embargo, la reacción de Leuquén fue poner la boleta en la boca de Contreras, “mientras me decía que me comiera sus migajas, luego me agarró del cabello, tironeándolo (…) yo solo atiné a intentar liberarme, tomándole las manos”.
“Ella repitió su agresión, repitiéndome que comiera de sus migajas, porque como diputada tenía para pagar diez veces, la cuenta (…). Todo (esto) en presencia de clientes y público en general. Fue tal mi shock que me dirigí a otro lugar del bar muy afectada sicológica y emocionalmente por lo sucedido”, complementa la querella.