PDI allanó sede de la Compañía de Jesús tras denuncias contra Felipe Berríos
En la diligencia, que fue ordenada por la Fiscalía Sur, se buscó incautar el informe de la investigación canónica que catalogó de “verosímiles” las acusaciones en contra del sacerdote por abuso sexual.
Personal de la Brigada de Delitos Sexuales de la Policía de Investigaciones (PDI) allanó durante este lunes la sede de la Compañía de Jesús, en la comuna de Santiago, en medio de la investigación en contra del sacerdote Felipe Berríos por denuncias en su contra por abuso sexual.
La diligencia fue solicitada por la Fiscalía Sur y se realizó con orden judicial en mano. El objetivo era incautar informe de la investigación canónica que elaboró la abogada María Elena Santibáñez, que catalogó de “verosímiles” las acusaciones en contra del fundador de Techo.
Según lo publicado por La Tercera, el Ministerio Público había solicitado en varias oportunidades la información para avanzar en la causa penal que se abrió luego que el propio religioso se “autodenunciara” ante la justicia civil, pidiéndole que esta intervenga para así poder demostrar su inocencia. Pese a las diligencias desplegadas por el Ministerio Público, la congregación negó los antecedentes basándose en el secreto de la vía canónica.
El secretario general de la Compañía de Jesús, Juan Cristóbal Beytía, aseguró que ellos “siempre estarán dispuestos a cumplir todas las órdenes judiciales, como corresponde, dando el mayor respaldo y protección a las denunciantes que recurren a ella solicitando su apoyo”.
En esa misma línea, confirmó que “este lunes 3 de octubre de 2022 se realizó, a requerimiento de la fiscalía y en cumplimiento de una orden judicial, la entrega de la investigación previa elaborada con ocasión de las denuncias formuladas contra Felipe Berríos”.
Las acusaciones contra el jesuita surgieron luego que una mujer de 32 años señalara que fue víctima de actos de connotación sexual cuando era adolescente. La afectada fue respaldada por la Fundación para la Confianza, que la acompañó con asesoría legal.
Días antes que se diera a conocer el caso, Berríos debió desistir de una invitación realizada por el Ministerio de Vivienda para ser parte de su programa de campamentos. Su llegada había causado ruido al interior del Gobierno, especialmente en la ministra de la Mujer, Antonia Orellana, que se opuso a su incorporación al cargo.