Con torres de control: proponen zanjas de 10 metros de ancho para frenar inmigración
La iniciativa vuelve a surgir después de la inestabilidad política que generó en Perú la destitución de Pedro Castillo como presidente.
La idea de construir zanjas para evitar la inmigración ilegal fue propuesta en 2021 por José Antonio Kast y ahora su continuador es Mauricio Ojeda AGENCIA UNO/ARCHIVO
José Antonio Kast había sido uno de los últimos políticos que había postulado la construcción de zanjas para evitar la inmigración ilegal en el extremo norte del país. Con el correr de los meses, esta idea rechazada por sectores oficialistas había quedado en la carpeta de los opositores; sin embargo, ha vuelto a aparecer en el contexto de inestabilidad política que atraviesa Perú tras la destitución de Pedro Castillo como presidente.
Una excavación de 10 metros de ancho y 10 metros de profundidad con torres de vigilancia a cargo del Ejército de Chile es el proyecto de reforma constitucional que presentó el diputado Mauricio Ojeda (IND-Republicano) durante las últimas horas en el Congreso Nacional.
La moción, que también incluye más presupuesto para vehículos y alta tecnología para las Fuerzas Armadas de Orden y Seguridad Pública, busca frenar el ingreso ilegal de personas extranjeras al país y, además, contribuir a la detección de diversos crímenes que se cometen en las fronteras con Perú y Bolivia.
“Resguardar la soberanía nacional y enfrentar la migración irregular, disuadiendo la entrada al país por medio de pasos clandestinos y promoviendo un ingreso ordenado y legal de migrantes a Chile”, es una de los extractos que presenta la iniciativa de Ojeda.
“Como hay inacción, vamos a actuar. Son cerca de mil kilómetros por donde ingresan ilegales que traen muerte, secuestros y sicariato, y Chile no se lo merece. El trabajo de las zanjas debiera ser realizada por el Cuerpo Militar del Trabajo del Ejército de Chile, lo que significaría menor cantidad de recursos”, comentó el parlamentario.
El remezón en Perú inquieta en la frontera norte
La destitución y posterior captura del ahora ex presidente Pedro Castillo en Perú es una noticia que inquietó a las autoridades del norte de Chile. En Arica, por ejemplo, temen una estampida de ciudadanos peruanos frente a las repercusiones sociales que podría traer este nuevo proceso en el país vecino.
“Junto con solidarizar con el pueblo peruano por la situación que están viviendo, no podemos descuidar lo que ocurre en la frontera. Menos hoy que existe ya una gran presión de ingreso a nuestro país. Ya en los últimos meses hemos visto un aumento de la población migrante que ingresa a Arica, por tanto, es urgente fortalecer la frontera con todas las medidas necesarias”, comentó el alcalde ariqueño, Gerardo Espíndola.
El 30 de noviembre, en el paso de Chacalluta, una turba de al menos 100 personas intentó ingresar a la fuerza al país desde Perú, sin embargo, Carabineros y la Policía de Investigaciones (PDI) pudieron controlar esta acción.
