Grupo de chilenos rechaza vuelo humanitario a Santiago: acusan “condiciones infrahumanas” de avión FACH
Luis Alberto aseguró que el viaje en el Hércules C-130 no fue tan cómodo como esperaban, además de cuestionar que cuando pisaron suelo español, aún no tenían habitaciones asignadas en el hotel donde se hospedarían.
Un grupo de 29 chilenos que fueron evacuados por la Fuerza Aérea (FACh) en un vuelo humanitario desde Tel Aviv, anunció que no volverá en los aparatos dispuestos por el Estado para retornar a Chile.
En un contacto con 24 Horas, Luis Alberto, parte de este grupo, aseveró que viajaran por su cuenta desde España a nuestro país, acusando falta de comodidades de uno de los aviones de la FACh que realizará la travesía.
El individuo señaló que “al principio, valoramos mucho lo que hizo el Gobierno de Chile respecto de la salida de la zona de conflicto”.
Sin embargo, tras esto Luis Alberto aseguró que el viaje en el Hércules C-130 desde Atenas a Madrid no fue tan cómodo como esperaban, además de cuestionar que cuando pisaron suelo español, aún no tenían habitaciones asignadas en el hotel donde hospedarían y que fueron dispuestos por el Estado para recibir a los evacuados.
“El primer periplo lo hicimos en un Boeing que era bastante bueno, pero luego la salida fue en el Hércules, que es un avión de guerra, condiciones casi infrahumanas, no para nosotros que tenemos en general 70 o más años. Por lo tanto, fue muy complejo, fueron casi cinco horas de vuelo, y al regresar muy cansados, sin baño disponible, y otro tipo de problemas, llegamos al hotel y nos encontramos con un mar de gente, en donde no teníamos habitaciones designadas, en donde se produjo una disputa con gente de menor de edad y, evidentemente, nos sentimos pasados a llevar (…)”, argumentó.
Y es que Luis Alberto explicó que el Boeing 737 que saldrá de Madrid con rumbo a Chile será destinado a mayores de edad, niños y mujeres embarazadas, acusando que ningún miembro de su grupo fue asignado a ese avión, por lo que deberían utilizar el Hércules C-130.
Ante esto, detalló que rechazaron la ayuda del Estado y se pusieron en contacto con su agencia de viajes para volver al país en un vuelo comercial.