Seremi de Salud respondió a petición de eutanasia de 4.500 perros en San Pedro de Atacama
El municipio realizó la petición tras varios ataques perpetrados por los canes e incluso aseveró que la ciudad "se ha transformado en una zona peligrosa para sus habitantes".
Desde la Seremi de Salud se recordó que "las municipalidades son las que deben resguardar la seguridad pública". ARCHIVO.
La Seremi de Salud de Antofagasta respondió a la petición de la Municipalidad de San Pedro de Atacama de aplicar la eutanasia a cerca de 4.500 perros asilvestrados, y explicó las razones por las que no puede hacerlo.
Luego del ataque de una jauría de al menos siete perros a una turista brasileña, quien quedó en estado de gravedad, el municipio presentó un recurso de protección ante la repartición, en el que solicitó sacrificar a todos los canes sin dueño.
De acuerdo a lo argumentado por la municipalidad, la ciudad “se ha transformado en una zona peligrosa para sus habitantes“. Indicó a la vez que por lo menos tres personas han sido víctimas de violentas mordeduras en el último tiempo.
En esa línea, recordó el caso de la joven Daniela Gamboa, de 27 años, quien murió luego de que una jauría la atacara el pasado 15 de octubre.
Qué dijo la Seremi
En su respuesta a la solicitud de la Municipalidad de San Pedro, la Seremi de Salud de Antofagasta reveló por qué no puede someter a eutanasia a los animales.
Fabiola Rivas, encargada de Zoonosis de la repartición, explicó los motivos que lo impiden. “Quiero señalar y dejar en claro es que como Seremi no tenemos competencia en el control sobre animales vagos, sin propietarios o abandonados“, precisó de entrada.
A continuación, detalló que “solo tenemos competencia en relación a animales sospechosos por la enfermedad de la rabia que presentan sintomatología“.
En conversación con el medio Madero, la funcionaria recordó que “las municipalidades son las que deben resguardar la seguridad pública, apoyadas por otras instituciones públicas”.
En ese sentido, Fabiola Rivas manifestó que la “Subdere tiene programas de tenencia responsable con fondos concursables por las municipalidades, para el control de la población de animales abandonados”.
