VIDEOS – Habitantes de la toma más grande de Chile protestan para evitar desalojo
El territorio conformado de 260 hectáreas habitadas por cerca de 3.000 familias tendrá que ser desalojado en seis meses.
Quienes viven en la toma más grande de Chile, ubicada en el cerro La Virgen de San Antonio, cortaron el tránsito durante la mañana de este lunes 25 de marzo, hacia la ciudad portuaria en plena hora punta.
Con gritos y barricadas, protestaron en contra del fallo de la Corte Suprema y la inminente orden de desalojo.
La ratificación se otorgó el viernes 22 de marzo, dando el vamos a lo indicado anteriormente por la Corte de Apelaciones de Valparaíso luego de acoger un recurso de protección presentado por la Inmobiliaria y Constructora San Antonio.
La resolución judicial y la orden de desalojo a la toma más grande de Chile
El máximo tribunal del país aprobó lo indicado por la Corte de Apelaciones, es decir, desalojar los terrenos que están tomados en el cerro La Virgen, ubicado entre San Antonio y Cartagena.
El territorio se conforma de 260 hectáreas habitadas por cerca de 3.000 familias. Es así como se constituye la toma más grande de Chile.
En el lugar se observan viviendas de material ligero, tiendas y alumbrado público, que provienen de conexiones ilegales al tendido eléctrico.
Según lo indicado por la Corte Suprema, quienes viven en el campamento tienen seis meses para salir de ahí. En base a esto, deben sacar todas sus pertenencias, incluyendo las construcciones.
Si lo anterior no se concreta en el plazo estipulado, se autorizó la intervención de fuerza pública.
Por su parte, la existencia de esta toma impidió la construcción del acceso norte hacia la ciudad, que era parte del Plan Nacional de Desarrollo Portuario.
¿Qué piden los habitantes con estas protestas?
Dentro de las peticiones por parte de los habitantes de la toma es, además de recibir una solución habitacional, que el gobierno compre el territorio donde se encuentran sus construcciones.
Karina Ayala vocera del sector Nuevos Aires, se mostró decepcionada del resultado de la reunión, a lo que dijo: “Solo píldoras, no hay ningún acuerdo firmado desde el Gobierno y nos quieren sacar de un lugar donde nosotros hemos construido un barrio. El catastro es plata mal gastada porque no nos sirve”, aseveró.