Secciones
Política

Abogada de Parisi reconoce que sigue con orden de arraigo por pensión de alimento impaga

La defensora del economista, Elizabeth Rodríguez, dijo que la medida no impidió el viaje de Parisi a Chile porque puede pedir permiso al tribunal para después devolverse a Estados Unidos.

Parisi arraigo
Parisi arraigo

La abogada del candidato presidencial Franco Parisi del Partido de la Gente (PDG), Elizabeth Rodríguez, reconoció que su defendido sigue con orden de arraigo nacional, decretada a raíz de la deuda por sobre $200 millones que mantiene el abanderado en pensiones de alimentos.

En entrevista con el matinal Contigo en la Mañana de Chilevisión, la abogada del economista explicó que “el procedimiento de familia sigue en plena tramitación”.

“Estamos en pleno proceso de presentar todo lo que hay que presentar y de ejercer los derechos que hay que ejercer. Por lo tanto se mantiene vigente la orden de arraigo hasta que este proceso informativo no se resuelva por el tribunal”, indicó Rodríguez.

Eso sí, Elizabeth Rodríguez aseveró que dicha orden de arraigo vigente no impide que su representado se traslade a nuestro país.

Según dijo, Franco Parisi no ha podido viajar porque contrajo COVID-19 y debe permanecer en aislamiento.

“Para nosotros y para Franco nunca ha sido problema el tema del arraigo, entenderás que para salir de Chile tu puedes solicitar permiso al tribunal aún teniendo orden de arraigo, entonces no es un problema complejo porque la familia de Franco vive en Estados Unidos”, contestó ante la consulta del conductor del espacio, Julio César Rodríguez.

En esta línea, la abogada de Parisi expresó que como todo procedimiento judicial, el de su defendido y otros relativos a familia, “tienen una naturaleza relativa”.

“Con respeto, creo que hay que dejar que los tribunales hagan su trabajo”, agregó Elizabeth Rodríguez.



Otra vez,

Otra vez, "simplemente un error"

A menos de un año de completar su mandato, el Gobierno del presidente Boric parece decidido a consolidar un legado donde los errores no solo son frecuentes, sino que son sistemáticamente minimizados. El daño que esto provoca no se limita a su evaluación política, sino que erosiona la ya frágil confianza ciudadana en las instituciones públicas.

{title} Bárbara Bayolo