“Lo que habrá es desigualdad ante la ley”: convencional Mena (UDI) no perdona aprobación de pluralismo jurídico
El constituyente de Vamos por Chile explicó en entrevista con EL DÍNAMO que el texto aprobado por la Convención dejó la puerta abierta a la existencia de sistemas de justicia paralelos.
Pese a ser la lista más grande dentro de la Convención Constitucional, Vamos por Chile (Evópoli, RN y la UDI), no logra incidir en las votaciones del pleno debido al quórum de los 2/3. La situación ha llevado a algunos miembros, como Felipe Mena (UDI), a estar en alerta tras la aprobación del pluralismo jurídico que ya forma parte de la propuesta de nuestra nueva Carta Magna.
En entrevista con EL DÍNAMO, el constituyente de Los Ríos se refirió a la propuesta de norma aprobada con 113 votos en el pleno que permite la creación de tribunales indígenas y mecanismos de coordinación, cooperación y resolución de “conflictos de competencia entre los sistemas jurídicos indígenas y las entidades estatales”.
Según expresó el convencional, la falta especificidad de lo aprobado por la Convención hace viable que exista “desigualdad ante la ley” entre personas indígenas y quienes no lo son; deja abierta la puerta a sistemas de justicia paralelos y puede ser el punto de “no retorno” para el electorado en el plebiscito de salida.
“Lo que se votó deja abierta la posibilidad de que existan sistemas de justicia paralelos, uno por cada pueblo o dos paralelos”, evidenció el constituyente.
-Con lo aprobado hasta el momento por el pleno, ¿qué tan cierto es que habrá desigualdad ante la ley?
-El punto es que justamente no se cerró o no se limitó el pluralismo jurídico y dejarlo abierto no era lo que correspondía porque nosotros tenemos que entregar claridad y escribir con claridad la nueva propuesta de Constitución para todo Chile. Se presentaron algunas indicaciones que también se rechazaron por el mismo plenario (…) Lo que más le molesta a los chilenos es que hayan injusticias o que no se mida con la misma vara. Cuando las cosas son injustas se señala, se alza la voz y a veces se recurre a mecanismos que no corresponden como la justicia por propias manos.
-¿Dejará de existir la igualdad ante la ley como la conocemos en la actualidad?
-Evidentemente sí, puede afectar la igualdad ante la ley. De Hecho, hoy con el pluralismo jurídico lo que habrá es desigualdad ante la ley. Si se rechaza una indicación donde se calificaba de forma precisa el pluralismo jurídico, obviamente que queda abierto para la desigualdad ante la ley. Es un camino que comienza y vamos a ver cuál es el contenido que le va a dar la misma Comisión de Justicia en su segundo bloque a este pluralismo jurídico.
-¿Se determinó que pasará frente a conflictos comerciales entre indígenas y el resto de los chilenos?
-No está claro todavía, sin embargo, en lo aprobado no hay certeza respecto a qué pasará en un conflicto o litigio económico y comercial entre una persona indígena y un no indígena. Según lo que está sucediendo en las distintas comisiones se solicita el consentimiento de cualquier actividad que pueda afectar el interés de los pueblos originarios. De alguna manera hay un trato especial a los pueblos originarios y está pendiente cómo se pueden resolver ese tipo de conflictos. Se tiene que hacer una consulta por cualquier actividad que se quiera realizar en territorio ancestral. Entonces, obviamente hay que estar atento a cómo se dará solución a un conflicto de esa naturaleza, pero no se ha zanjado todavía.
-¿Qué se necesita para limitar el pluralismo jurídico?
-Me gustaría que se le pongan los límites precisos, es decir, que la justicia indígena opere sólo entre indígenas, que no afecte a los no indígenas, que exista el derecho para poder decidir recurrir a un tribunal ordinario o uno indígena. También que se excluyan las competencias de estos sistemas de justicia indígena en materias de derechos públicos como es el penal, familiar. Hay que limitarlo bien para que no afecte la igualdad ante la ley.
Mena advierte que hay “puntos de no retorno” frente a plebiscito de salida
La última edición de la encuesta Criteria trajo malos resultados para la Convención Constitucional, ya que la desaprobación ciudadana de la instancia aumentó cuatro puntos porcentuales (llegó a 48%) y la mayoría de los consultados no sabe si votará por el Rechazo o Apruebo en el plebiscito de salida (43%).
Este último indicador, según voces al interior de la Convención, responde a que aún queda camino por recorrer de cara a julio del 2022 cuando finalice el periodo de redacción y la población tome su decisión final.
Sin embargo, en palabras de Felipe Mena, los chilenos tienen “puntos de no retorno” a la hora de elegir el Apruebo o el Rechazo, que deben ser mirados con atención por él y sus colegas de la Convención.
-¿Crees que puede crecer Rechazo con normas como el pluralismo jurídico?
-Cada día en la Convención tiene su afán, cada día alimenta alguno de los dos lados. Como se está dando en relación a las distintas normas, se está dando una señal distinta a todos los chilenos. Hay chilenos que consideran que la igualdad ante la ley debe estar considerado en la Constitución. Hay que ir viendo cuáles son las reacciones de la ciudadanía respecto a estas iniciativas aprobadas y vamos viendo cómo se va construyendo esta hoja en blanco que ya no está en blanco y ya tiene el pluralismo jurídico. Evidentemente, hay puntos de no retorno, pero esos son bastante personales.
-¿Cuál ha sido el mayor error de la Convención?
-Se está dando un patrón en todas las comisiones y el plenario de recomendaciones de la centroderecha y parte de la izquierda para mejorar y poner los puntos conflictivos de los diferentes informes sobre la mesa. Pero no nos hacen caso, no nos escuchan. También parece que tampoco conversan tanto entre las izquierdas, porque terminan rechazando en el pleno y después se intentan corregir las normas en las comisiones.
-¿Qué falta para llegar a acuerdos y alcanzar el quórum de los ⅔?
-Falta tener menos enamoramiento de las ideas y más disposición a escuchar. Eso no se ha dado en ninguna comisión. Además, por lo general, se aprueban 13 de 40 artículos y eso en una escala del 60% es una nota de 3,2. Eso no se da porque la centroderecha quiera boicotear el proceso, porque no nos necesitan, se da simplemente porque las izquierdas de las distintas comisiones no conversan entre ellas, ni menos con nosotros.