CPLT pide al Gobierno más datos que permitieron desmentir citación del FBI a Lucía Dammert

En septiembre del año pasado, la ex jefa de los asesores de la Presidencia de la República Lucía Dammert fue vinculada como testigo a una investigación de narcotráfico que estaba llevando el FBI de Estados Unidos. La noticia remeció a La Moneda y a la propia funcionaria de Gobierno, quien desmintió haber sido citada a entregar tales declaraciones voluntarias en la justicia estadounidense por el caso que protagonizó el político mexicano Genaro García Luna, quien fue declarado culpable por tener nexos con el “Chapo” Guzmán y el cartel de Sinaloa.

“El Gobierno de Chile ha consultado al Gobierno de Estados Unidos, por medios oficiales, respecto de la veracidad de los hechos descritos en la publicación del medio de comunicación Interferencia. Luego de recibir respuesta al mencionado requerimiento, se confirma que dicha información es falsa“, argumentaron desde el Ejecutivo.

Frente a esta situación que involucró a Dammert, el Consejo para la Transparencia (CPLT) acogió un recurso de amparo que presentó un periodista de este medio en contra de la Subsecretaría de Relaciones Exteriores, determinando que esta cartera deberá entregar una serie de detalles de las comunicaciones oficiales sostenidas entre los gobiernos de Chile y Estados Unidos en el marco del desmentido.

“Al solicitarse más detalles sobre estas comunicaciones, la Subsecretaría denegó el acceso a la información aludiendo la inexistencia de la información y argumentó que dichas conversaciones ‘fueron transmitidas por vías verbales’, por lo que no existiría soporte documental que permitiera atender a lo consultado. Tampoco entregó detalles de la forma en la que se logró confirmar que la ex asesora de la Presidencia no fue citada a declarar en ninguna investigación o proceso judicial llevado a cabo en los Estados Unidos”, resolvieron en el CPLT.

Presidente del CPLT quiere más información del caso Dammert

El Consejo para la Transparencia ordenó a la Subsecretaría de Relaciones Exteriores la entrega de datos como la fecha y hora en que se produjeron los diálogos, si se trató de comunicación presencial, telefónica o de otro tipo, en qué lugar ocurrió, y principalmente, quiénes fueron los interlocutores.

“Es natural que se quiera tener más información sobre el caso, dado su alto interés público. Buena parte de este caso tiene origen en que el Ejecutivo, en su momento, afirmó que había consultado al Gobierno de Estados Unidos y que desde ahí alguien habría señalado que la persona en cuestión no había sido citada a declarar en ninguna investigación o proceso judicial llevado a cabo en ese país”, dijo Francisco Leturia, presidente del CPLT.

“Llama la atención que la respuesta de Relaciones Exteriores se fundara sólo en el hecho de que no se dejó registro de conversaciones verbales, una llamada por ejemplo, porque ello podría subsanarse, permitiendo chequear la veracidad de la información, la calidad de la fuente o el nivel de diligencia observado, que son los estándares típicos exigidos cuando se hace ejercicio del derecho a informar”, cerró.