“Del No+AFP al más AFP”: los cambios a la reforma de pensiones que explican el rechazo de parte del PS y el PC
Las constantes modificaciones al proyecto original presentado por La Moneda terminaron por colmar la paciencia de un grupo importante de parlamentarios oficialistas, que puso en duda el acuerdo con Chile Vamos en el Senado.
En los últimos días, las voces disonantes respecto a la reforma de pensiones y al acuerdo que impulsa el Ejecutivo con Chile Vamos en el Senado para sacar adelante la iniciativa han sumado fuerza al interior del oficialismo, a pesar de los intentos de personeros como Lautaro Carmona (PC) para ordenar sus filas.
El germen plantado por el ex alcalde Daniel Jadue (PC), quien en redes sociales expresó que “es mejor retirar el proyecto que seguir aumentando las ganancias y la estafa de las AFP”, siendo secundado por parte importante de la bancada de diputados de su partido.
Pero ahora fue el turno de la bancada de diputados del PS, donde varios de sus integrantes dejaron ver sus dudas sobre la efectividad de la reforma de pensiones, e incluso Marcos Ilabaca ya anunció que votará en contra.
El parlamentario calificó de “inaceptable” los términos en que se aprobaría la reforma de pensiones, señalando que “este Gobierno ha renunciado a poder modificar el mercado de las AFP, aceptando las pequeñas concesiones que la derecha le ha entregado”.
Ilabaca hizo alusión a una de las principales promesas de campaña del presidente Gabriel Boric, el fin del sistema de las AFP, para explicar su negativa a apoyar la propuesta, aseverando que “se esfumó, no existe”.
Es que el borrador inicial de la reforma de pensiones tenía como uno de sus capítulos la derogación del Decreto Ley N°3500, que crea el sistema de administradoras de fondos de pensiones en plena dictadura, pero que fue dejado de lado a mediados de 2023 ante la imposibilidad de conseguir los votos para su aprobación en el Congreso.
“Si para la derecha es ideológicamente importante mantener el Decreto Ley 3500 dictado en dictadura puede ser, pero para nosotros lo que nos importa es el resultado, que es mejorar las pensiones”, fueron las palabras de Jeannette Jara, ministra del Trabajo, para explicar en ese entonces la modificación de la iniciativa.
“Este Gobierno ha renunciado a poder modificar el mercado de las AFP, aceptando las pequeñas concesiones que la derecha le ha entregado, con el objeto de decir ¿Sabe qué? En mi Gobierno se hizo una reforma de pensiones”. Y eso lo encuentro inaceptable”, disparó ante este escenario Marcos Ilabaca, agregando que “mi voto no estará disponible para poder entregarle esta condena a los jubilados de nuestro país y este beneficio a las AFP para seguir teniendo las senda utilidades que hasta el momento han tenido”.
La postura de Ilabaca fue compartida con matices por su compañero Daniel Manouchehri, quien sostuvo a La Tercera que “el sistema de AFP fracasó. No podemos haber llegado al gobierno pidiendo no más AFP para terminar con más AFP. El Gobierno debe someter a votación, y si la derecha no está disponible para que suban las pensiones hoy, deberán hacerse cargo ante los chilenos”.
Reforma de pensiones: del 6% adicional a solidaridad a la fórmula 1,2 y 3
Uno de los principales tópicos que planteó la reforma de pensiones cuando fue presentada fue una cotización adicional del 6%, con costo al empleador, que sería destinada íntegramente a solidaridad.
Sin embargo, la falta de apoyos nuevamente hizo naufragar esta intención y surgió en el camino la fórmula 3+3, donde 3% sería destinado a las cotizaciones individuales y el 3% restante a solidaridad intergeneracional, complemento por cuidado de terceros y compensación por diferencias en las expectativas de vida, lo que tampoco fue respaldado en la Cámara de Diputados.
Ante esto, a fines de julio del año pasado, Mario Marcel, ministro del Interior, presentó un nuevo mecanismo para destrabar la discusión del 6%: la fórmula 1,2 y 3, donde 3% será para las cuentas individuales y 3% a solidaridad, pero este guarismo se dividía en 1% para aporte permanente y el 2% restante a un préstamo reembolsable tras la jubilación.
A pesar de los intentos de Marcel de sacar adelante esta pauta, tampoco tuvo eco y ahora la propuesta más tangible para conseguir un acuerdo en el Senado es 5,5% para las cuentas individuales y un 0,5% para compensar las diferencias en las pensiones entre hombres y mujeres.
Esto terminó por generar anticuerpos en el propio oficialismo, ya que el diputado Boris Barrera (PC) precisó a La Tercera que el Ejecutivo debía reponer “su proyecto original, donde el 6% vaya a solidaridad (…), y tal vez votarlo. Y si no hay acuerdo en que sea 6%, dejarlo en 3% y 3%, pero también votarlo, y pasarle la responsabilidad a quien realmente la tiene, que es la derecha, y que la gente vea quiénes son los que están votando en contra de los actuales jubilados”.
“El Gobierno debe escuchar a la gente y no validar una propuesta miserable. Yo creo que debemos apuntar a sistema de reparto, como las Fuerzas Armadas. Yo espero más dureza del Ejecutivo con la derecha y dejar de transar con principios de la solidaridad”, sentenció al mismo medio la PS Emilia Nuyado.