Tras infiltrarse en múltiples foros, agentes del FBI lograron desarticular una red de usuarios que compartían métodos para violar las barreras de seguridad y crear tarjetas de crédito falsas que utilizaban tanto en la Red como en comercios físicos.
Así y tras dos años de investigación, la organización arrestó a 24 personas: 11 en Estados Unidos, y otros 13 entre Gran Bretaña y Japón. Todos los detenidos son hombres con edades comprendidas entre 18 y 25 años, y algunos se enfrentan a penas de hasta 40 años de prisión si llegan a ser condenados por cargos de conspiración para cometer fraude virtual.
Con esta operación contra el ciberfraude, a juicio del FBI, se evitaron posibles pérdidas de US$205 millones a más de 411 mil tarjetas de crédito y débito que habrían sido vulneradas, aunque no dieron detalles sobre los bancos involucrados.
Hay que apuntar además de evitarse las pérdidas de dinero y arrestarse a los supuestos responsables, se logró contactar con las personas e instituciones afectadas a fin de indicarles cómo reparar las violaciones de seguridad y protegerse mejor en el futuro.