Príncipe Harry reveló que probó hongos alucinógenos en casa de la actriz Courteney Cox
El Príncipe Harry relató su experiencia con esta droga en su más reciente libro llamado "En La Sombra".
El Príncipe Harry, duque de Sussex, lanzó esta semana su libro “En La Sombra“, donde relata pasajes desconocidos de su vida, incluyendo su salida de la familia real junto a su esposa, la actriz Meghan Markle.
Pero también, el hijo menor del rey Carlos III dio a conocer un desconocido episodio que vivió en la casa de la actriz Courteney Cox, donde probó hongos alucinógenos.
Ocurrió cuando asistió a la casa de la actriz que interpretó a Mónica Geller en Friends, mientras ella no estaba, puesto que unos amigos organizaron una fiesta.
“Estaría de viaje, en un trabajo, y no le importaba que nos quedáramos en su casa“, relató el Príncipe Harry sobre dicho momento. Sin embargo, y de sorpresa, Cox apareció pero les pidió que no se fueran porque “había mucho espacio”.
El duque de Sussex reconoció que estaba enamorado de Courteney Cox desde que la vio en Friends. “Todavía estaba confundido porque… Ella era Mónica. Y yo era un Chandler. Me preguntaba si alguna vez reuniría el coraje para decírselo. ¿Había suficiente tequila en California para hacerme tan valiente?”, consignó en su libro, según publicó la revista Us Weekly.
El Príncipe Harry y los hongos
En medio de la fiesta, relató el Príncipe Harry, sacaron “una enorme caja de chocolates con champiñones de diamantes negros” y todos comieron. “Mi compañero y yo tomamos varios, los tragamos y lo acompañamos con tequila”, escribió en el libro “En La Sombra”.
“No fue muy divertido y no me hizo particularmente feliz pero me hizo sentir diferente, y ese era el objetivo principal”, destacó.
En cuanto a los efectos que tuvieron los hongos, el Príncipe Harry detalló que sufrió un “subidón” cuando se dirigió al baño.
Una vez ahí aseguró que vio un basurero con un pedal, el que de repente se convirtió en una “cabeza” mientras lo miraba.
“Pisé el pedal y la cabeza abrió la boca“, escribió el hijo de Lady Di, y vio “una gran sonrisa abierta. Me reí“, reconoció.
Luego salió del baño, “riendo tontamente“, y le comentó a un amigo lo que había vivido, por lo que lo invitó a que fuera y lo comprobara. Pero a diferencia de lo que había vivido, dicho sujeto pensó que su chaqueta era un “dragón” y entró en pánico.
“Mi encantador viaje había sido su infierno. Qué desafortunado. Qué interesante”, cerró el Príncipe Harry sobre dicho momento.