Secciones
Mundo

Policías de Colombia dispararon a manifestantes mientras se jugaba el partido de River vs Junior

Durante el encuentro también se oyeron disparos y el árbitro interrumpió por unos minutos el desarrollo del juego debido a que varios futbolistas se vieron afectados por los gases lacrimógenos.

Policías Colombia River
Policías Colombia River

El partido por Copa Libertadores disputado ayer entre Junior y River Plate tuvo que ser suspendido por algunos instantes luego que se registraran fuertes disturbios entre la policía de Colombia y manifestantes a las afueras del estadio Romelio Martínez.

El entrenador de River Plate, Marcelo Gallardo, y sus futbolistas demoraron a la hora de realizar el calentamiento previo debido a los gases lacrimógenos que fueron lanzados en las inmediaciones de la cancha producto de los enfrentamientos que se produjeron entre la policía y los manifestantes.

Durante el encuentro también se oyeron disparos y el árbitro uruguayo Esteban Ostojich interrumpió por unos minutos el desarrollo del juego debido a que varios futbolistas se vieron afectados por dichos gases lacrimógenos.

“Es un momento complejo, uno no se puede abstraer de lo que pasa. No es normal jugar en una situación tan inestable de lo que vive el pueblo colombiano, no fue normal ni en la previa ni en el partido”, dijo Gallardo al término del encuentro en una conferencia de prensa.

“Con gases lacrimógenos en el partido, escuchando estruendos, una situación anormal en todo sentido, no podemos mirar a otro lado… En esas circunstancias se jugó el partido”, agregó.

Junto a ello, organizaciones y líderes populares denunciaron a través de redes sociales la fuerte represión contra manifestantes en las afueras del estadio.

Según las publicaciones, las bombas lacrimógenas fueron disparadas por agentes del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) luego que un centenar de jóvenes se concentraran a las afueras del estadio para pedir la suspensión del partido entre Junior y River Plate a causa de la dramática situación que padece el país.


No va a haber un segundo milagro

No va a haber un segundo milagro

Los Panamericanos estaban en el suelo y se lograron salvar en apenas cuatro meses. Pero eso no va a pasar de nuevo. Por eso preocupan tanto los evidentes atrasos del Mundial Juvenil que, ya en septiembre, tendrán a Chile como escenario. Hasta aquí se sabe muy poco del evento, salvo que ya se cayó la sede de Viña, que ahora hay quejas y denuncias en la de Rancagua, que la selección juega muy poco y que nadie conoce el himno ni la mascota. ¿No habrá que entrar a preocuparse?

{title} Felipe Bianchi