El Papa Francisco manifestó “mucho dolor” por “el homicidio del padre Olivier Maire”, el sacerdote asesinado esta semana por un perturbado mental de nacionalidad ruandesa que fue internado en un centro psiquiátrico después de la confesión voluntaria de su crimen a la Gendarmería.
“Me enteré con gran dolor del asesinato del padre Olivier Maire. Envío mis condolencias a la comunidad religiosa de los monfortianos de Saintlaurent-sur-Sèvre, en Vendée, a su familia y a todos los católicos de Francia”, dijo el Papa Francisco durante su audiencia general.
Las autoridades policiales no catalogaron el asesinato como un acto terrorista, de hecho lo están investigando como “homicidio voluntario”.
El autor del crimen, un hombre de 40 años identificado como Emmanuel Abayisenga, es también sospechoso de haber provocado un incendio en la catedral de Nantes.
El padre Olivier era superior provincial de la Congregación de los Misioneros Monfortianos en Francia.
“La emoción es fuerte, compartida por todos, tras la trágica muerte del padre Olivier Maire. Que su vida ofrecida dé frutos y suscite nuevas vocaciones religiosas”, señaló Abbé Grosjean, Sacerdote de la diócesis de Versalles en Francia.
L’émotion est forte, partagée par tous, croyants ou non… Grande union de prière avec les Montfortains et le @Diocese_85 après la mort tragique du Père Olivier Maire, assassiné ce matin. Que sa vie offerte puisse porter du fruit et susciter de nouvelles vocations religieuses. pic.twitter.com/vf7ML6Ntzp
— Abbé Grosjean ن (@abbegrosjean) August 9, 2021
