Federación Internacional de Natación deja fuera a atletas transgéneros de competencia femeninas
Además, se buscará establecer una categoría "abierta" para las competencias de natación de participantes que hayan cambiado su identidad de género.
La Federación Internacional de Natación (FINA) votó por la prohibición de que atletas transgénero puedan competir en las pruebas de élite de mujeres si han pasado por cualquier etapa del proceso de pubertad masculina.
Esa nueva política requiere que las competidoras transgénero hayan completado su transición antes de los 12 años para que puedan participar de las competencias femeninas. Además, la federación buscará establecer una categoría “abierta” para las competencias de natación de participantes que tengan una identidad de género diferente a la que nació.
La medida fue aprobada por un 71% de los 152 miembros de la FINA y fue descrita como “solo un primer paso hacia la completa inclusión” de atletas transgénero. La decisión fue tomada durante un congreso general extraordinario en el marco del Campeonato Mundial en Budapest, Hungría. Antes, los miembros de la federación habían escuchado el informe de un grupo de trabajo compuesto por médicos, abogados y expertos en deportes.
“La testosterona durante la pubertad masculina altera los factores fisiológicos determinantes del rendimiento humano y explica las diferencias de rendimiento humano basadas en el sexo, que se consideran claramente evidentes a la edad de 12 años”, afirmó el doctor Michael Joyner, fisiólogo y experto en rendimiento humano y miembro del panel, de acuerdo con BBC. “Aun si la testosterona se suprime, los efectos que alteran el rendimiento se retienen”, agregó.
Sandra Hunter, doctora especialista en las diferencias de sexo y edad en el rendimiento atlético, agregó que las ventajas son de origen estructural y se mantienen en el tiempo, como la longitud de las extremidades, tamaño del corazón, altura, tamaño de los pulmones.
De acuerdo con Brent Nowicki, director ejecutivo de FINA, el enfoque de la federación en la formulación de esta política fue amplio, basado en la ciencia e hizo énfasis en competitividad justa.
Caso Lia Thomas
El debate sobre participación de transgéneros en la natación se volvió el centro de atención después de las experiencias de la nadadora estadounidense Lia Thomas.
Hace tres meses, Thomas se convirtió en la primera nadadora transgénero en ganar el principal título universitario de Estados Unidos. La atleta había nadado para el equipo masculino de Pennsylvania durante tres temporadas antes de que iniciara un tratamiento de reemplazo de hormonas en el primer semestre de 2019. Desde este momento ha roto diversos récords para su equipo.
Varios nadadores universitarios del equipo nacional y de equipos olímpicos firmaron una carta abierta para apoyar a Thomas y todas las nadadoras y nadadores transgéneros y no binarios, pero por otro lado, muchos atletas y organizaciones también manifestaron dudas sobre la inclusión trans.
En febrero, la Federación de Natación de Estados Unidos actualizó su política para nadadores de élite con el objetivo de permitir a atletas transgénero competir, pero con miras a reducir cualquier ventaja injusta, lo que incluye la imposición de pruebas de testosterona 36 meses antes de la competencia.