Rusia calificó de “histérica” la reacción por caída de misil en Polonia
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, destacó la reacción “contenida y más profesional” del presidente estadounidense Joe Biden ante el incidente en la zona fronteriza con Ucrania.
Rusia calificó este miércoles de “histérica” la reacción de Occidente por la caída de un misil en Polonia, territorio que es parte de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), y que inicialmente fue adjudicado a Moscú.
El Kremlin respondió a las críticas luego que el gobierno polaco aclarara que si bien el proyectil antiaéreo era de origen ruso había sido lanzado desde Ucrania, cayendo en una zona fronteriza entre ambos países.
Dmitri Peskov, portavoz del gobierno de Rusia, señaló que “tiene sentido destacar la reacción contenida y más profesional de Estados Unidos y su presidente (Joe Biden)”, la que a su juicio contrastó con la manifestación “absolutamente histérica de Polonia y una serie de otros países”.
El vocero agregó que “los polacos tuvieron todos los medios posibles para informar de inmediato de que se trataba del resto de un cohete S-300, y por tanto todos los especialistas hubieran entendido inmediatamente que no podía ser un misil relacionado con las Fuerzas Armadas de Rusia”.
Peskov enfatizó que los misiles antiaéreos S-300 son de fabricación rusa, pero también son usados por las fuerzas ucranianas. “Seguramente habrá que pedirles a las autoridades polacas que sean más mesuradas, equilibradas y profesionales cuando hablen de temas tan sensibles y peligrosos”, expresó.
La comunicación de Polonia a la OTAN
Horas después de la caída de los misiles en la provincia de Lublin, el presidente polaco, Andrzej Duda, declaró en Varsovia que “es probable” que el elemento “fuera lanzado por Ucrania” y que “nada indica” que fuera un “ataque intencionado contra Polonia”.
Aquello llevó a que Polonia informara a la OTAN que el hecho no se trataría de un ataque deliberado, por lo que no habría necesidad de activar las instancias de defensas en conjunto de los países miembros, la que habría hecho escalar el conflicto a niveles globales.