VIDEOS – Escala el conflicto en Medio Oriente: masivos bombardeos israelíes dejan más de 270 muertos y más de mil heridos en Líbano

Previo a un incremento en los bombardeos entre Israel y Hezbollah en el sur del Líbano, la Casa Blanca llamó a los ciudadanos de Estados Unidos a no viajar a ese país y pidió a quienes permanecen allí que hagan abandono de la zona a la brevedad, ante la posibilidad de que se produzcan nuevos atentados.

El llamado de Washington se produce en medio del operativo desplegado por Israel en su frontera norte, el que incluye bombardeos contra objetivos de la agrupación que controla el área sur del Líbano y que en las últimas semanas realizó constantes ataques contra sus ciudadanos y su infraestructura.

De acuerdo con un balance efectuado este lunes por el Ministerio de Salud del Líbano, los últimos ataques de la aviación israelí dejaron al menos 274 muertos y más de mil heridos, entre ellos niños, mujeres y socorristas.

“Los ataques del enemigo israelí contra ciudades y pueblos del sur desde esta mañana han dejado cientos de víctimas fatales entre los que se encuentran niños y mujeres”, detalló la repartición a través de un comunicado.

Mientras el primer ministro libanés, Najib Mikati, aseveró que Israel está embarcado en “una guerra de exterminio“, el ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, manifestó que los bombardeos proseguirán “hasta que logremos nuestros objetivos: devolver a los residentes del norte de Israel sanos y salvos a sus hogares“.

Además, este lunes, el vocero del Ejército israelí, Daniel Hagari, confirmó que su país atacará objetivos de Hezbollah en el centro del Líbano, en particular en el valle de la Beqaa, por lo que llamó a los habitantes de ese sector a que evacuen a la brevedad los lugares “dentro o cerca de las casas donde se almacenan cohetes y armas“.

Atentados con beepers y walkie talkie en Líbano

Los masivos bombardeos de Israel en Líbano se produjeron como represalia al lanzamiento de misiles y drones explosivos por parte de Hezbollah, que reaccionó de esa manera a la explosión de miles de beepers y walkie talkie en poder de miembros de la agrupación, lo que dejó al menos 37 muertos y miles de heridos.

Todo comenzó el pasado martes, cuando alrededor de 3.000 beepers estallaron en distintos puntos de ese país, los que causaron la muerte de 12 personas y dejaron más de 2.700 heridos.

Cuando los líderes de la agrupación chiíta aún intentaban dilucidar qué había ocurrido con el primero de los atentados en Líbano, al día siguiente se produjo una nueva explosión masiva, esa vez de walkie talkies, lo que dejó un saldo de 25 muertos y alrededor de 500 heridos.

Tras los atentados, tanto el gobierno libanés como la jefatura de Hezbollah responsabilizaron a Israel de lo ocurrido, aunque desde Tel Aviv no se ha entregado ni una confirmación ni un desmentido de que el Mosad, la agencia de inteligencia israelí, esté detrás de lo ocurrido.

Tanto desde la empresa dueña de la marca de los aparatos en Taiwán, como de aquella que los fabricó en Hungría, descartaron tener participación en la preparación del masivo atentado.

Las investigaciones preliminares apuntan a que los beepers fueron manipulados antes de su entrega a la agrupación, momento en el que se instaló en cada uno de ellos una cierta cantidad de explosivo, así como un dispositivo para hacerlo estallar a distancia.

Respecto de los walkie talkies, la agrupación chiíta los había comprado hace cerca de seis meses, y previo a su entrega a Hezbollah también fueron manipulados para instalar explosivos en su interior.