El relevo de Felipe Avello ha llegado: abran paso a Karol Dance
El sucesor del "Pececillo" no podía ser otro que el "Loquillo". Se ganó el puesto sin copiarle y manejando un mini tanque en vivo por las calles de Santiago.
Luc Gajardo es Periodista El Dínamo.
Karol Jesús Lucero Dance, cuyo nombre sin querer queriendo ya es uno que está pintado para la comedia delirante, tiene 28 años, y una década en la tele.
Su historia es archi conocida.
Karol hoy día 13 de enero del 2016 a las 8 de la mañana está montado arriba de un vehículo anfibio de ocho ruedas, sin techo, del porte de una moto de cuatro ruedas, muy parecido a un tanque pequeño. Karol está haciendo trompos en medio del estacionamiento de Mega con una mano en el aire gritando: “¡Are you ready, motherfuckers!”. Luego invitará a los hombres que están en el estudio del Mucho Gusto a subirse al mini tanque y salir a la calle a bordo del improbable medio de transporte.
Antes de salir del canal, chocó el auto de la productora general, armó una caravana de autos de prensa a los que convenció de seguirlo. Antes de eso, tomará un casco militar y lo tirará lejos. El casco aterriza sobre la cabeza de un hombre.
Saldrá a la calle y manejará a muy baja velocidad y probablemente contra varias leyes del tránsito por Vicuña Mackenna. Dirá que va camino a la Avenida 10 de julio en un viaje sin retorno. En una intersección hará trompos en cámara lenta.
Desde el estudio Salosny y Edwards miran confundidos y preocupados. Neme está muerto de risa.
Después pasan a un despacho donde Alvaro Sanhueza calienta los ánimos en el aeropuerto esperando la llegada de Sampaoli. Dará resultado. Cuando vuelvan a Karol y su aventura, éste viene con peluca de rulos onda disco y lentes de sol en forma de corazones manejando el mini tanque. El resto también va disfrazado con cotillón. Van de regreso al estudio. Dance dice que censuraron la sorpresa que tenía preparada.
Es lo más gracioso, simpático e improbable que se ha visto en años en la televisión chilena en vivo. Desde Felipe Avello en SQP que no se veía algo así. Karol Lucero hace recordar al Pececillo, pero bien, no de esa forma que molesta. No como cuando desde noteros hasta comediantes imitan el estilo de Avello provocando más vergüenza ajena que risa.
La comedia de Dance no es forzada, es natural. Porque a sus 28, lo dijimos, ya tiene una década de carrete televisivo encima que le permiten no tomárselo tan en serio. Lo vimos crecer. Es como, en cierto sentido, algo así como un Bart Simpson de la vida real. Puede pasarse para la punta, cruzar todos los límites, pero sus actos se ven como los de un niño travieso y no como los de un tipo intentando hacerse el gracioso.
Por eso cuando le bailó un perreo chacalonero a Patricia Maldonado, o cuando entró a su casa y se tiró a puntear la cama de la cantante no fue chocante sino divertido.
Por eso cuando le dice Milf a Ivette Vergara, cuando opina que ver en calzas a Cata Edwards es una experiencia religiosa, o bromea con José Antonio Neme sobre que mientras estaba cocinando se le quemó el arroz, o columpia a Luis Jara diciendo que en los backstage de sus conciertos no hay nada de comida sino que puro copete, suena empático, tierno, cómico, quirúrgicamente sarcástico,hasta “inocente”, y no burdo.
Nadie se enoja con él porque- además de ser prácticamente un santo- toca una tecla de comedia tan afinada/afilada que es imposible enojarse y no reírse.
En resumidas cuentas: Karol “Loquillo” Dance en Mucho Gusto es lo que Avello el Pecesillo era al SQP, cosa que se echaba mucho de menos y por ende se agradece. Sobre todo porque el relevo natural de alguien como Avello no debía ni podía ser un imitador.
Será cosa de tiempo, tal como pasó con Justin Bieber– que pasó de ser el artista más odiado por los hipsters a tenerlos a todos cantando “Sorry”– que los fans de Avello reconozcan en Karol a su nuevo ídolo.
Mira a Karol Dance manejando un mini tanque por las calles de Santiago acá