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11 de Marzo de 2024

Los últimos momentos de Ronald Ojeda

Luego de todo lo que hemos conocido de este caso, ¿habrá aquilatado el presidente Boric las consecuencias para su credibilidad y para el futuro de la coalición de gobierno si se llegara a acreditar la participación del régimen chavista en este crimen?

Por Patricio Gajardo
Reconozco la valentía del senador del PS José Miguel Insulza, que ha sido el único que ha dicho claramente que acá hay un móvil político, que el secuestro y asesinato del refugiado venezolano tuvo que ver con el aparato de seguridad venezolano. AGENCIA UNO.
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Patricio Gajardo

Patricio Gajardo es analista político

Según la Policía de Investigaciones (PDI), los captores contaban con datos sobre el departamento en que vivía Ojeda. Además, habrían accedido a los turnos de trabajo de la empresa de seguridad, que funcionaba en la modalidad de cuatro días trabajados y cuatro de descanso. Y, el 21 de febrero, cuando se concretó el secuestro, era la primera noche libre en esa semana.

Eran las 3:15 de la mañana cuando un comando, supuestamente de la PDI, rapta a Ronald Ojeda Moreno de 32 años, desde el departamento, con ropa interior, ni siquiera le permiten ponerse zapatos, y no golpean la puerta, sino usando un ariete, mecanismo para irrumpir y sorprender a los sospechosos – en el caso de la policía – se llevan a Ojeda mostrándolo sin ninguna precaución a las cámaras de seguridad del edificio.  

La motivación, la planificación, la ejecución y la huida. Esos son los frentes por donde se mueve la indagatoria de la Fiscalía que busca resolver el crimen.

Lo que está claro es que hubo dateo, y una similitud sorprendente al secuestro del opositor venezolano Antonio Ledezma, que cumplía arresto domiciliario en abril de 2015 en Caracas.

El Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin) “se llevó abruptamente” al ex alcalde de Caracas de madrugada, sin [mostrar] una orden de detención o allanamiento. A Ledezma lo sacaron en pijama sin zapatos, igual que a Ronald Ojeda, en medio de la noche.

El día del secuestro eran dos los conserjes que estaban de turno, pero uno de ellos, según detectó la PDI, desapareció entre las 02.36 y las 04.03 de la madrugada. Esta maniobra, para los detectives, podría dar luces de la filtración de información de Ojeda desde su propio edificio indicando el departamento  preciso al que había que dirigirse.

 El operativo se hizo como lo hace la inteligencia, resguardó el exterior. Participaron 15 personas. Ronald Ojeda supo desde el primer momento en las manos de quienes estaba. Había escapado de la cárcel de Ramo Verde, -donde estuvo también el líder opositor Leopoldo López- y había logrado escapar luego de 249 días hasta que Ojeda, junto a algunos de sus compañeros, una vez libres, denunciaron haber sido sometidos a torturas. Así que Ronald sabía lo que le esperaba cuando lo sustrajeron del departamento.

Otro dato curioso, pero normal en un secuestro político o por encargo fue que fotografiaron a Ronald Ojeda, en la Costanera Norte, para él o los mandantes de los homicidas. Necesitaban una prueba. Este “Angel” -menor de edad- dice que no sabía nada de nada, y Maikel Villegas que fue el que sacó las fotos es uno de los prófugos. Ambos imputados de nacionalidad venezolana.

Los restos del ex teniente venezolano fueron encontrados en una toma bajo un paso sobre nivel de Camino a Melipilla, en Maipú, a la altura de Pajaritos. El cadáver estaba dentro de una maleta, enterrado debajo de una estructura de cemento, a más de un metro de profundidad. Pero habían recibido una llamada anónima, indicando dónde estaba el cuerpo. Había que entregar un mensaje con el asesinato.   

La autopsia indicó que murió por “asfixia mecánica posicional”. No había cortes ni orificios de balas en la maleta.  La asfixia mecánica posicional, también conocida como asfixia postural, es una muerte que ocurre cuando la posición del cuerpo obstruye las vías respiratorias y no puede entrar aire. En término simples lo enterraron vivo.

Reconozco la valentía del senador del PS José Miguel Insulza, que ha sido el único que ha dicho claramente que acá hay un móvil político, que el secuestro y asesinato del refugiado venezolano tuvo que ver con el aparato de seguridad venezolano.  

Cabe una reflexión última: luego de todo ello, ¿habrá aquilatado el presidente Boric las consecuencias para su credibilidad y para el futuro de la coalición de gobierno si se llegara a acreditar la participación del régimen chavista en este crimen?

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