5 cosas para saber si tu hijo o hija está siendo víctima de bullying homofóbico

Un estudio de 2011 señaló que el 68% de estudiantes lesbianas, gays y bisexuales chilenos informaron la existencia de bullying homofóbico en sus colegios. Una reciente publicación de UNESCO, incluso, asegura que las escuelas pueden estar “entre los espacios sociales más homofóbicos” del estudiante.

Por esto, Maru González, miembro del Consejo Consultivo Nacional de GLSEN, la Red de Educación de la Diversidad Sexual que hoy está presente en todas las escuelas de Estados Unidos, vino a Chile hace algunos días invitada por la Fundación Todo Mejora a realizar dos seminarios sobre las buenas prácticas en la prevención de este tipo de bullying. En esta pasada, la especialista conversó con El Dínamo y entregó algunos tips a los padres y profesores para estar alertas ante este tipo de situaciones.

1. El bullying homofóbico es silencioso

“Ocurre en lugares donde no hay supervisión de un adulto: en el comedor, en los pasillos y en los vestuarios de la escuela. Por lo tanto, muchas veces profesores y padres no se dan cuenta del alcance del problema del bullying homofóbico” dice Maru González. Además, muchos y muchas jóvenes Lesbianas, Gays, Bisexuales y Trans (LGBT) no lo reportan a un adulto. Un estudio de GLSEN hecho en EEUU en 2011 dice que más del 60% de las y los estudiantes LGBT que han sido víctimas de acoso no reportaron la incidencia a un miembro de la a facultad escolar.

2. El bullying cambia el comportamiento

Los padres y madres deben estar atentos a las señales de alerta que podrían indicar que sus hijos e hijas están sufriendo bullying homofóbico en sus entornos: cambios en el comportamiento, excusas para no ir a la escuela o a otro lugar donde pueda sufrir este acoso, falta de interés, y en casos más severos, “las señales pueden incluir tristeza, depresión, pensamientos de suicidio, abuso de drogas o alcohol, o abandono de los estudios”, explica la especialista.

3. Cualquiera puede ser víctima y victimario

Un documento elaborado por UNESCO señala que este acoso proviene generalmente de otro estudiante, pero en algunos casos procede de docentes y otro tipo de personal de la escuela e incluso “incluye hostigamiento, chantaje y privación de derechos académicos”. Otro estudio, señala que el bullying homofóbico no sólo afecta a quienes se declaran LGBT, sino quienes son o parecen serlo. Así, una persona heterosexual con gustos “alejados de la norma de género convencional”, también pueden sufrir el bullying homofóbico: su vestimenta, sus gustos musicales, su forma de hablar o sus posturas corporales pueden ser objeto de burlas de sus compañeros.

4. En el bullying homofóbico hay un tercero

Un estudio realizado en Israel, señalo que la mitad de las personas encuestadas que habían sufrido bullying homofóbico dijeron que los demás estudiantes no intervinieron o ignoraron el abuso, mientras otros colaboraron con los agresores.

5. La comunicación con una víctima de bullying homofóbico es fundamental

“El bullying por orientación sexual o identidad de género tiende a ser controversial, sobre todo en los colegios”, explica González. Por esto, es fundamental que quienes van a intervenir como padres o educadores, deben tener conocimiento sobre conceptos básicos de la diversidad sexual, y considerar que las escuelas, colegios y liceos están obligados a proteger a todos sus estudiantes de la discriminación. Según Maru González, la experiencia de una escuela segura para niños y niñas, libre de discriminación por orientación sexual o identidad de género debe, además de incluir intervenciones y apoyo individual, debe existir una política sistémica entre “los y las educadores, activistas, estudiantes padres y miembros de la comunidad trabajando juntos para cultivar un ambiente seguro donde se celebra la diversidad y donde todos se sientan apoyados, respetados y afirmados”.

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