Ministra Carmen Castillo tras su semana más compleja: “Esto es sin parar y sin llorar”

La ministra de Salud, Carmen Castillo, vivió una de las semanas más complejas desde que asumió en enero: renunció su subsecretaria de Redes Asistenciales, Angélica Verdugo, y parlamentarios presentaron una acusación constitucional en su contra, lo que debería serle notificado mañana.

Sobre lo último, la secretaria de Estado señaló en conversación con La Tercera que “no es lo habitual en una gestión de ministerio y ojalá nunca uno tuviera que enfrentar una situación así, pero es un derecho de los parlamentarios y uno tiene que asumirlo y demostrar que lo que plantean no es lo que uno observa y para lo cual ha trabajado“.

Para ella, la acusación “no tiene méritos” ya que “muchos de los temas que se están planteando son los mismos de la interpelación, como deuda hospitalaria, inversiones y listas de espera”.

“Salud es un ministerio complejo y es difícil dar respuesta a todo de forma inmediata. Los procesos son más complejos porque tienen que llegar a las personas y uno no puede perder la razón de ser del ministerio, que es esa. Es complejo, pero no imposible de gestionar“, añadió.

Consultada por no tener el respaldo de un partido político en una situación como la que enfrenta, Castillo fue enfática en afirmar que no le juega en contra ya que “Los parlamentarios que están gestionando la acusación, yo creo que van más hacia el ministerio en sí, que a la figura del ministro”.

Por otro lado, la ministra descartó dejar su cargo ante los difíciles momentos que enfrenta su cartera. “No estoy ni considerando el renunciar, ya entré en la máquina y no me quiero bajar. En esto uno tiene que trabajar y yo siento que me la puedo, no me da ningún temor”, indicó.

En cuanto a la salida de la subsecretaria de Redes Asistenciales, Carmen Castillo sostuvo que “me dio mucha pena, hubiera querido mantener el trabajo en equipo, pero fue una decisión personal y que, por supuesto, tuvimos que respetar”.

“Me hubiera encantado que no se hubiera ido. Ella tomó la decisión y había que respetarla. Su estilo es así, muy de convicción. Ojala hubiéramos terminado el gobierno juntas, pero bueno, se decidió y uno tiene que echarle para adelante, la contingencia sigue y uno no puede parar. Esto es sin parar y sin llorar“, agregó.