Caso Bastián Bravo: madre del joven fue encontrada culpable de abuso sexual contra su hija
La Fiscalía Centro Norte solicitó una pena de 7 años de cárcel por el delito de abuso sexual y otros 4 años de cárcel por el delito de producción de material pornográfico infantil.
El Cuarto Tribunal Oral en lo Penal de Santiago declaró culpable a Mireya Sepúlveda de los delitos de abuso sexual infantil y producción de material pornográfico infantil en contra de su hija de entonces seis años.
La investigación se inició luego que la policía hiciera un hallazgo casual de imágenes sexuales de la niña al interior del computador de la familia, mientras realizaba un conjunto de diligencias destinadas a ubicar al joven Bastián Bravo, hijo del matrimonio, que se encontraba desaparecido y cuyo cuerpo apareció en la cuesta Lo Prado el 21 de enero de 2014.
Por su parte, el padre de la niña y el joven, Iván Bravo, fue absuelto de todos los delitos y fue dejado en libertad.
La fiscal Paola Trisotti mostró su satisfacción con la decisión judicial, indicando a radio Cooperativa que “se cumplió el objetivo principal que era respecto de lo que sí había suficiente prueba, que era la participación de la señora Mireya Sepúlveda en dos delitos de máxima gravedad, como son la producción de material pornográfico y abuso sexual de su hija”.
En cuanto al delito de abuso sexual de menores, se acreditó que la imputada en diferentes ocasiones y en fechas no determinadas, realizó actos de significación sexual en su hija, consistentes en tocar con las manos y boca la zona genital de la niña.
Asimismo, el tribunal estableció la existencia del delito de producción de material pornográfico infantil. Este ilícito quedó acreditado con el hallazgo casual de un set de 16 fotografías con contenido sexual de la niña, las que fueron captadas por su madre el 8 de octubre de 2013. En las imágenes aparece la niña desnuda en una cama con las piernas abiertas. Las fotografías captan la zona genital y anal.
El detalle de la sentencia con sus fundamentos se conocerá el próximo 10 de agosto, ocasión en que el tribunal dará a conocer la pena a la que la imputada fue condenada.
La Fiscalía Centro Norte solicitó una pena de 7 años de cárcel por el delito de abuso sexual y otros 4 años de cárcel por el delito de producción de material pornográfico infantil.