Informe de la PDI contradice versión de carabinero investigado por disparar a joven mapuche
Según el sargento, estaba arreglando la correa de la escopeta “cuando sentí que se produjo el tiro”. Esto no fue aceptado por los expertos en balística.
En enero de este año, el joven Brandon Hernández Huentecol fue baleado. Hasta ahora, el caso apunta a la presunta responsabilidad del sargento segundo Cristián Rivera, y un peritaje de la Policía de Investigaciones descarta la versión que entregó el carabinero respecto de esta causa.
Según publica El Austral, un grupo de peritos de la PDI realizó un informe en el que aseguran que la escopeta de Rivera estaba en buen estado, y no tenía “alteraciones en sus piezas o mecanismos”.
“La distancia a la cual se encontraba la boca del arma, del cuerpo de Hernández Huentecol, debió oscilar alrededor de 50 centímetros de la zona de la cadera”.
La fiscal que indaga este caso, Nelly Marabolí, indicó que una de las hipótesis se daría si se comprueba que el disparo se produjo “cuando uno de los menores (Brandon) trata de arrebatar la escopeta antidisturbios a uno de los funcionarios de Fuerzas Especiales”.
El sargento Rivera declaró para el caso que él estaba arreglando la correa de su arma, ésta quedó colgando y “sentí que se produjo el disparo”.
Los expertos en balística de la PDI no coinciden con esta declaración, ya que estiman que “una escopeta colgando libre sólo tiene opción de producir un disparo vertical hacia el suelo, lo que no condice con la trayectoria angulas que tienen los perdigones en el cuerpo de Hernández”.
El subprefecto de la Brigada de Homicidios, Víctor Ruiz, adelantó que están realizando un análisis “dado que existirían discordancias en las versiones de Brandon y el carabinero”.