Las insólitas situaciones que trabajadores de Canal 13 denuncian sufrir en su trabajo diario tras despidos
El Dínamo accedió a un documento creado por trabajadores del canal para evidenciar la crítica situación vivida tras los despidos masivos y la llegada de reemplazos de la empresa externa que prestará servicios.
El panorama al interior de Canal 13 está más complejo que nunca, luego de que el viernes pasado se efectuaran los anunciados despidos masivos que afectaron a todas las áreas de la estación, dejando una planta de trabajadores con una disminución de 270 trabajadores en un cuestionado proceso de externalización de servicios a la empresa española Secuoya.
El problema -según afirman al interior del canal- es que muchos de los cargos no han sido vueltos a llenar, a lo que se suma una situación caótica para quienes siguen cumpliendo funciones y sacando al aire la programación diaria: muchos de los nuevos trabajadores de esa empresa no fueron capacitados para hacer su trabajo y han debido ser suplidos en muchos casos por los mismos periodistas y productores.
El Dínamo ayer publicó detalles del traumático proceso y de cómo ha sido a incorporación de los trabajadores dependientes de Secuoya en el canal. “Hay informes escritos donde se evidencia que hay trabajadores que no sabían prender las cámaras. No es culpa de ellos, pero así están las cosas”, aseguran. Eso -por ejemplo- ha generado complicaciones extremas para “Vértigo”, el estelar estrella de la señal propiedad de Andrónico Luksic, que hasta hace unas horas no contaba con equipo para sacar el aire el capítulo de este jueves.
En ese contexto, este medio accedió al documento creado por trabajadores de Canal 13 con el objetivo de hacerlo llegar a la empresa española, donde se advierten las condiciones en que están trabajando debido a la nula capacitación de los funcionarios llevados por ellos y las dificultades en las transmisiones.
Insólitas situaciones
En un informe de dos páginas se exponen episodios que han vivido en vivo los profesionales, mientras han salido al aire. También cómo se ha dado la preparación del material audiovisual. “Los periodistas sufrieron ruidos en el retorno o saturación de audio y al momento de dar a conocer el problema quedaron definitivamente sin éste, lo cual no permitió escuchar órdenes ni las declaraciones que salían en pantalla. No sabían cuándo cortar, entre todas las que cosas que conlleva salir en un móvil en directo”, dice el texto.
También denuncian que los camarógrafos no sabían hacer el “balance de blancos” o ecualizar de manera correcta los audios, lo que hacía parecer que los periodistas “estuvieran gritando al aire“.
Las quejan también apuntan a los nuevos funcionarios de ingesta (donde se incorpora el material de las grabaciones fuera del canal), lo que ha generado problemas en Prensa principalmente por las demoras al no saber ocupar los equipos. “Además, los materiales quedan cortados o sin todos los clips que correspondían”, dice la misiva.
Otras situaciones denunciadas son que “los montajistas no se saben las claves para entrar al sistema de edición (…) tampoco como colocar efectos básicos, poner sonidos ambientes cuando no los hay o hacer un fundido“. “Tampoco saben cómo tapar rostros cuando hay menores de edad en el casos de notas policiales, una herramienta básica para cumplir con la ley chilena”, agregan.
Esto se repite con la inclusión de gráficas, falta de criterio al seleccionar imágenes y terminaciones deficientes. “Hubo algunos con imágenes en color naranjo”, señala el documento y agrega que tampoco los técnicos saben usar las distintas vías para salir en vivo, como microondas o mochilas 4G.
Lo más insólito ha sido en el Departamento de Prensa, donde los turnos de los operadores han terminado a las 18:00 horas, “sin pretender dejar a al menos un operador por área hasta el término del noticiario”, pasadas las 10 de la noche. “Fue tortuoso sacar al aire los programas de T13, pero no podríamos llegar a imaginar qué habríamos hecho en caso de una emergencia”, agregan.
Finalmente, el documento explica que las “personas escogidas por Secuoya no tienen las habilidades ni capacidades para llevar a cabo su trabajo”, aunque “algunos” tienen la voluntad de aprender. “Prácticamente los periodistas y productora debieron asumir variadas funciones para permitir la salida al aire de las ediciones de Tele13, lo que agotó al equipo, retrasó la pauta y provocó múltiples problemas”, concluye.